Luego de entrar al mercado de la telefonía y de su rotundo fracaso en esta apuesta, son los empleados de Microsoft quienes pagarán las consecuencias.
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Microsoft anunció que eliminará más de mil 800 empleos y registrará en sus libros una reducción de activos por 950 millones de dólares, esto, mientras intenta salvar su error al entrar al mercado de la telefonía.
En 2014, Microsoft adquirió el negocio de telefonía de la finlandesa Nokia por siete mil 300 millones de dólares con la idea de sacar provecho de una industria de rápido crecimiento.
El año pasado, se vio el resultado de esta mala decisión ya que se redujo fuertemente el valor de esa inversión y eliminó 26 mil empleos.
Microsoft, bajo el mando del ex director general Steve Ballmer, intentó apalancar su experiencia en el software para competir contra rivales cada vez más poderosos. Ahora, con Satya Nadella al mando, la empresa se ha reenfocado en el negocio de Microsoft Corp. al software y los servicios de Internet.
“En el área de telefonía estamos enfocando nuestros esfuerzos allí donde nos diferenciamos –con empresas que valoran la seguridad, la facilidad de manejo y nuestra capacidad de Continuum y consumidores que valoran lo mismo”, afirmó Nadella, CEO de la compañía tecnológica. “Continuaremos innovando en el sector de los dispositivos y en nuestros servicios en la nube a través de todas las plataformas móviles”.
De los mil 850 empleos que se eliminarán, mil 350 posiciones son en Microsoft Mobile Oy en Finlandia, y otros 500 en todo el mundo.
La compañía con sede en Redmond, Washington, tenía once mil 354 empleados a nivel mundial en su último año fiscal.