Más de la mitad de los hospitales del país se encuentran en zonas particularmente vulnerables por la actividad sísmica o meteorológica donde resulta difícil garantizar el bienestar de los pacientes.
Ciudad de México.- De acuerdo con el Comité Nacional de Evaluación, Diagnóstico y Certificación de Hospitales del Programa Hospital Seguro Frente a Desastres (PHS), 65% de los hospitales en el país se encuentran en zonas de alta vulnerabilidad meteorológica o sísmica.
En principio, un hospital está pensado como un establecimiento que debe cumplir con todas las normas de seguridad y debe resguardar la vida de quienes en él se encuentran. Sin embargo, muchos de ellos quedan expuestos ante fenómenos naturales y dejan de ser seguros y eficaces en sus servicios. Esto resulta bastante complicado tomando en cuenta que los hospitales albergan a personas que se encuentran en un estado particular de vulnerabilidad y al ser atendidos en hospitales con estas características, son doblemente vulnerables.
La caída de una barda en la explanada del Hospital Civil en la ciudad de Oaxaca, la caída de parte de uno de los plafones del séptimo piso del Hospital de Especialidades de San Alejandro y de elementos del recubrimiento de una de las columnas de la delegación sur en Puebla del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por el sismo con epicentro en Veracruz del 29 de julio, o las afectaciones del año pasado en el Hospital de Cancerología y el Donato G. Alarcón, ubicados en Acapulco, son algunos de los ejemplos más recientes de hospitales afectados por la actividad sísmica.
El PHS es una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) instrumentada a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Mientras que el Comité Nacional está encabezado por representantes de la OPS y de la Coordinación Nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, y lo integran comisionados de instituciones públicas y privadas que tienen hospitales, e instituciones que aportan conocimiento en la materia, como la Universidad Autónoma de México (UAM).
La vulnerabilidad puede presentarse desde el diseño del edificio, la ubicación y construcción del establecimiento, hasta su mantenimiento y conservación, la gestión de procesos de seguridad y protección civil y el control de daños y resultados.
Duarte Yuriar, arquitecto responsable del Laboratorio Habitabilidad y Desarrollo Sustentable de la UAM Xochimilco, indicó que con base en los resultados de la evaluación se harán las intervenciones convenientes para el fortalecimiento preventivo de las unidades médicas reconocidas por su vulnerabilidad.
Asimismo, el equipo del arquitecto desarrolló un modelo de fortalecimiento hospitalario con perspectiva sustentable y aplicación de ecotecnologías. El proyecto piloto será aplicado en hospitales públicos de Acapulco, Mexicali y Oaxaca.
elsemanario.com con información de medios.