A pesar de las experiencias amargas que vivieron las generaciones pasadas con respecto a las famosas devaluaciones y problemas financieros generados por los cambios transexenales, ahora la economía mexicana está libre del peligro de vivir una crisis con el nuevo gobierno e incluso, los analistas proyectan un mayor crecimiento del que se han vivido en los últimos años en el país, generado por factores como el fortalecimiento de las reformas estructurales y la mayor demanda de mercancías por parte de Estados Unidos.
Ciudad de México.- Más allá de quien resulte ganador en las próximas elecciones presidenciales, los analistas visualizan una transición tranquila y sin sobresaltos para la economía mexicana y el Fondo Monetario Internacional (FMI) asegura que habrá un mayor crecimiento del país para este año y para el 2019, cuando comience sus gestiones la nueva administración federal.
En su reporte World Economic Outlook, esta institución elevó los niveles de crecimiento para México en 2.3 por ciento para 2018 y en 3 por ciento para 2019, con lo cual se despeja el panorama que podría incluir algunos nubarrones que amenazarán la economía nacional derivada del cambio de gobierno.
Con esto se “descarta una crisis transexenal”, asegura el FMI y también ve positivas las condiciones externas para el país, ya que el buen momento que pronostican para la actividad comercial de Estados Unidos será un factor que impulse la economía nacional.
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Factores positivos que apuntalan en crecimiento
En ese sentido, las proyecciones para Estados Unidos es que avanzará 2.9 por ciento el presente año y 2.7 por ciento en 2019, y además de esto “el estímulo emanado de la Reforma Fiscal en EU incrementará temporalmente el nivel de crecimiento con un efecto favorable para la demanda de sus socios comerciales, México y Canadá en particular”, señaló el FMI.
En este reporte que retoma el sitio Dinero en Imagen, señala que además del entorno exterior, al interior “la implementación de ciertos aspectos de la amplia agenda de reformas aprobada hace cinco años ha progresado bien, incluso en los sectores de energía, financiero y de telecomunicaciones”, lo que le da mucha solidez a la economía nacional.
Finalmente, también hace una serie de recomendaciones para mejorar el entorno, ya que “se debe seguir trabajando en iniciativas de mediano plazo, incluida la aplicación reformas judiciales enfocadas al combate a la corrupción y promuevan el Estado de derecho, así como las reformas del mercado laboral que ayuden a reducir la informalidad”.
De esta manera, a pesar de que hay propuestas de gobierno de al menos un candidato que ha expresado su deseo de hacer cambios al entorno económico y financiero nacional, la perspectiva del FMI es de estabilidad, crecimiento y sin posibilidades de que exista una crisis con el cambio de gobierno.
