Explicaré primero lo que yo entiendo por sorpresa y por perplejidad. Sorpresa es lo que sucede súbitamente y, ya sea de manera dolorosa o gozosa, despierta una respuesta emocional que nos conmueve de manera más o menos intensa. La perplejidad es una respuesta ante un suceso también generalmente súbito, pero en ocasiones no tan repentino y en otras perdura en el tiempo; despierta emociones en las que la sorpresa es sobrepasada por el desconcierto y la desconfianza, y las emociones provocan la necesidad de buscar explicaciones, lo que en general no sucede con los sentimientos despertados ante la sorpresa. Marina y López Penas en su Diccionario de los Sentimientos piden no intelectualizar demasiado el concepto de perplejidad y reservarlo para la respuesta emocional. Sin embargo, el concepto se ha ampliado y se ha utilizado en otros ámbitos, como ejemplo puedo mencionar el libro de Javier Muguerza, en el que hace un análisis filosófico profundísimo de la perplejidad. Además se utiliza como una medida probabilística en las Ciencias de la Información y forma parte de los análisis de las Ciencias de la Complejidad. Edgar Morin es también un estudioso de la perplejidad y quizá toda su filosofía parte de la respuesta ante este fenómeno.
Yo me voy a referir sólo a la respuesta emocional que despierta un hecho y que rebasa la sorpresa al despertar sentimientos de confusión, inseguridad y desconfianza. Me sucedió ante dos noticias de las que me enteré la semana pasada, de la primera supe a través de dos noticiarios de la televisión española y que en México no parece que haya sido destacada. En Cuba se llevó a cabo la primera manifestación espontánea de un grupo poblacional, desde 1959 en que se inició la instalación del gobierno revolucionario. En los informativos se destaca que el grupo estaba formado por unos 400 cubanos, que inicialmente iba a caminar por calles principales de La Habana, aunque luego fue desviada a calles secundarias y que tenían autorización y permiso gubernamental. Lo que me dejó perplejo absolutamente es que la manifestación popular –la primera llevada a cabo en 60 años–, fuera en contra del maltrato animal; la verdad es que en las imágenes parecían menos de los 400 que se mencionan, pero en todo caso debemos suponer que la manifestación popular fue espontánea, autorizada y numerosa. La otra noticia que me conmovió fue en la que nos enteramos que la Senadora de la República, María de Jesús Rodríguez (Jesusa), subió a la tribuna del Senado para expresar: “los animales deben ser tratados como personas”, no era una invitación que resaltará los Derechos Humanos, sino que destacaba la necesidad de crear derechos para los animales hasta llegar a humanizarlos, al menos eso entendí cuando dijo que los animales debían ser tratados como personas.
Me dejó perplejo que la primera manifestación pública del pueblo cubano después de 60 años de un gobierno totalitario que impedía toda manifestación popular, la primera que se lleva a cabo, fuera contra el maltrato animal. Causa desconcierto que no haya sucedido por causas superiores como la libertad, la propiedad privada, el libre tránsito, entre otras. Sin más en este momento, vemos una gran cantidad de cubanos haciendo un largo viaje por vía terrestre, algunas veces andando, desde Ecuador, único país que los recibe por vía aérea, hasta llegar primero a México y después intentar ingresar a Estados Unidos. Por diferentes razones, la antigua vía de salida, la marítima, más corta aunque igual de peligrosa, dejó de ser eficiente, y ahora deben hacer este larguísimo recorrido. Es difícil pensar que los cubanos hayan tenido tan poca sensibilidad, tan poca solidaridad, como para que la primera, o cuando menos, una de las primeras oportunidades que tienen de manifestarse públicamente, la hayan desperdiciado. Más parecería uno de los montajes del gobierno revolucionario, como cuando después de haber hecho prisioneros a 80-100 ciudadanos por delitos en contra de la Revolución, ante una visita extranjera como las visitas Papales (que sucedió dos veces), les daban libertad a 20 o 30 dando por apariencia una flexibilización, aunque del resto de los prisioneros después no supiéramos nada. Me atreveré recomendarles a ustedes tres lecturas que nos muestran, narradas por testigos, la vida socio-política de Cuba en tres diferentes periodos de la época revolucionaria cubana y que a mí me parecen devastadores.
De la actitud de nuestra Senadora habría que destacar cómo parece inusitado que use la máxima tribuna parlamentaria para este caso, ante la multitud de problemas que tiene el Senado en sus manos, la Reforma Educativa, la Ratificación del Mandato (tan importante para el Ejecutivo), las modificaciones o no a la Ley Energética, la posibilidad o no de una nueva Ley Fiscal. Se queda uno con la duda si la actitud de la legisladora es auténtica o es simplemente una actitud histriónica, después de pensarlo pienso que la respuesta es esta última, para lo que tiene un largo entrenamiento y facultades probadas.
La respuesta de sentirse perplejo debe estar en la búsqueda de la tranquilidad intentando encontrar explicaciones, meditar las causas, y obtener respuestas al examinar los hechos.
Lecturas recomendadas:
Javier Muguerza, Desde la perplejidad. Fondo de Cultura Económica, México/Madrid/Buenos Aires, 1990.
Significado de perplejidad, obtenido de: https://es.wikipedia.org/wiki/Perplejidad.
José Antonio Marina y Marisa López Penas, Diccionario de los sentimientos. Anagrama, Barcelona, 1999.
Paulette Barberousse, “Fundamentos teóricos del pensamiento complejo de Edgar Morin”. Revista Electrónica Educare [en línea] 2008, XII (sin mes). Fecha de consulta: 17 de abril de 2019. Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=194114586009>
Jorge Edwards, Persona non grata. Ediciones Cátedra, Madrid, 2015.
Roberto Ampuero, Nuestros años verde olivo. Debolsillo, Santiago de Chile, 1ª reimpresión, 2016.
Leonardo Padura y Laurent Cantet, Regreso a Ítaca. Tusquets Editores, México, 2016.
Ambas me parecen planeadas desde la cúpula, para guardar una.imagen
Aunque a lo mejor su contenido tiene un significado distinto, no hay que olvidar la Guía de Perplejos de Maimónides por su trascendencia histórica y filosófica. La actitud de la gente hacia los animales está cargada de pasión y poco de reflexión ecuánime, al grado en efecto de priorizar la por encima de todos los temas que merecen atención.
En una época donde el Senado se a convertido en un zoológico, no debe de extrañar la postura de la senadora, siguiendo una postura Federal
La apatía, el cansancio producto de la mañanera, y de excusas para temas indefendibles, nos invade para temas serios,
Muchas gracias Dr Ramiro pero yo pienso que nada ha cambiado. Todo está planeado que pena por los Cubanos que cada día les cuesta más su libertad, Saludos
Gracias Dr Ramiro es una pena los Cubanossiguen buscando su libertad y nada ha cambiado.