Retirar los popotes de plástico es un comienzo para detener la contaminación de los océanos, pero hay otros productos que se encuentran en mayor escala en los mares y no están siendo regulados.
Con la intención de reducir la contaminación, varias empresas han decidido retirar los popotes de plástico de sus sucursales, la última ha sido Starbucks. Sin embargo, hay quienes aseguran que esta es parte de una estrategia publicitaria más que una medida para contrarrestar el desecho masivo de productos que dañan el medio ambiente.
Sea cual sea la razón, eliminar los popotes de un solo uso de ninguna manera remediará la crisis de contaminación plástica, pero este compromiso de Starbucks por sí solo mantendrá a más de 2,500 millones de popotes de plástico fuera de sus cafeterías, y fuera del océano de nuestro mundo.
Según un estudio del Foro Económico Mundial, al ritmo actual, habrá más plástico que peces en el océano para el año 2050. Los popotes son uno de los peores contaminantes del océano, pero hay otros que se pueden encontrar en mayor cantidad:
Platos/vasos/utensilios desechables
- Para las comidas fuera de casa; ya sea en la playa, un parque o junto a un lago, muchos optan por utilizar plástico reutilizable en vez de llevar sus propios platos y vasos. Estos rara vez se recogen en su totalidad y terminan en el fondo del mar. Así sea en una fiesta o como utensilios en una oficina lejos del océano, estos desechables seguramente afectarán la vida marina.
Tapas/tapones
- Todas esas botellas de las que bebemos vienen con tapas de plástico, al igual que los recipientes de comida pequeños. Varios animales se las tragan y mueren por asfixia o por acumulación de plástico en su estómago. Además, sus residuos causan un fuerte impacto a la vida marina.
Bolsas de plástico
- Este tipo de bolsas son muy comunes y muy utilizados por supermercados, tiendas de comestibles, vendedores ambulantes, farmacias y otros lugares, hasta restaurantes. Pueden asfixiar tanto a la vida marina como a las aves; se atoran alrededor de los corales, impidiendo que el oxígeno en el agua llegue a los organismos vivos que están debajo; o pueden ser tragados por un pez grande o una foca.
Botellas de plástico
- Las botellas de plástico flotan o se hunden y, a medida que se deterioran por el oleaje y al golpear rocas, se vuelven más blandos, haciendo que puedan ser tragados con mayor facilidad y también causen asfixia en animales marinos como las focas. Científicos piensan que el material contenido en estos recipientes de plástico también se filtra en el agua que los rodea, envenenándola con toxinas cancerígenas.
Envolturas de alimentos
- Miles de envolturas de dulces, frituras, barras de chocolate y hasta las envolturas que vienen en la comida para llevar terminan en el mar. Todo este plástico daña al ecosistema, ya que son toneladas las que contaminan el océano.
Cigarrillos
- Los cigarrillos son el principal producto encontrado en los cuerpos de agua en todo el mundo. El hecho de que más de dos millones se encuentren intactos en un solo día de limpieza, sugiere que el volumen de cigarrillos en el océano es mucho, mucho mayor a esa cifra. La salud personal debería ser un incentivo para dejar de usar este producto, pero, si tu salud no lo es, ¿qué hay de los demás, incluida la vida marina?
Si bien las intenciones de las empresas al retirar los popotes de plástico pueden ser buenas y ayudarán a reducir el impacto negativo que estos productos le causan al medio ambiente, este debe ser apenas el primer paso y las empresas y gobiernos necesitan proponer y aprobar leyes prohibiendo los plásticos, antes de que sea demasiado tarde.
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