Especialistas de Estados Unidos y Reino Unido han utilizado la técnica de imagen por resonancia magnética para investigar patrones del cerebro cuando las personas toman decisiones riesgosas, en materia de política.
Londres, Reino Unido.- El pensamiento humano es uno de los enigmas más complejos para la ciencia, afortunadamente, neurólogos y psicólogos de Estados Unidos y Reino Unido, están dando pasos agigantados para revelar sus secretos mediante investigaciones que intentan relacionar las actitudes políticas con lo que está dentro de del cerebro.
“Al observar cómo el cerebro está procesando los fenómenos políticos, podemos comprender un poco mejor por qué hacemos lo que hacemos”, dijo Darren Schreiber, de la Universidad de Exeter, en Reino Unido.
Schreiber comenzó usando la técnica de imagen por resonancia magnética (IRM) para investigar patrones del cerebro cuando las personas tomaban decisiones, especialmente aquellas que involucraban riesgos.
El experto vio variaciones en las partes del cerebro que eran más activas en las personas que se describían a sí mismas como conservadoras y en aquellas que se consideraban liberales.
El científico no generaliza sobre cómo piensan exactamente conservadores y liberales, pero cree que su trabajo sugiere que diferentes actitudes políticas reflejan divergencias enraizadas de cómo se ve el mundo.
¿Cómo podrían las diferencias genéticas expresarse en diferencias políticas en el mundo real?
Hibbing y Montague probaron con respuestas instintivas a imágenes diseñadas para provocar asco y miedo, y hallaron un vínculo entre la fuerza de la reacción a las imágenes y cuán conservadores socialmente podían ser los puntos de vista de una persona.
“La gente que tiene actitudes más protectoras sobre temas como inmigración, que promueve mayores castigos a criminales, la gente que se opone al aborto… Estos son individuos que parecen tener una reacción mucho más fuerte a las imágenes repulsivas”.
Estas respuestas se miden biológicamente, por lo tanto el estudio está vinculando explícitamente opiniones conscientes con respuestas inconscientes.
John Hibbing cree que los motores del subconsciente, que evolucionaron hace mucho tiempo en respuesta a peligros físicos urgentes, impulsan las mentes políticas más de lo que se cree.
“A las personas les gusta pensar que sus propias convicciones políticas son racionales, que son una respuesta sensible al mundo que las rodea, aunque no sea así.”
El Semanario Sin Límites con información de la BBC