Recientemente, una de las marcas más reconocidas por el público, Apple, reveló el precio oficial de su próximo y más costoso smartphone hasta la fecha: el iPhone X con un precio de 999 dólares; claramente se puede identificar la existencia de una brecha de tecnología entre las diversas clases sociales que abundan en el mundo.
A pesar de que la fabricación de un smartphone de la marca Apple, Samsung, Sony o de otra línea conocida a nivel mundial, su costo por el producto incrementa por la imagen, postura y respuesta que recibiría el consumidor ante una sociedad en donde la esencia de una persona se identifica por lo que porta y por lo que viste.
No obstante, diversas personas aspiracionales (usuarios que cuentan prestamos de banco, pero su estado económico no es muy sólido) sacrifican sus ahorros por el simple objetivo de tener un producto que los perciban como una persona superior, una persona capaz de entrar a la sociedad que portan autos de lujo y prendas de tela casimir. El claro ejemplo es una adolescente de China, la cual, se volvió viral en YouTube ya que anunció su virginidad a la venta a cambio de tan solo obtener el nuevo producto de la manzana mordida, el iPhone 8S.
https://www.youtube.com/watch?v=-zTZtOVArWQ
En un artículo escrito por el ganador del Premio Nobel de la Paz en el 2006, Muhammad Yunus y compartido por el medio CNN, expresó que específicamente la marca Apple provocó una brecha de tecnología en donde las clases altas y medias puedan tener acceso en comprar este producto, lo que causó que otras marcas como Sony, Samsung, Google, entre otros, entraran a la competencia.
“Las corporaciones globales enfocan intensamente sus estrategias en competir para servir a los más ricos y a la clase media. Si trabajas en un negocio convencional, no vas a elegir diseñar un teléfono para los pobres hasta que se haya agotado los mercados con ingresos superiores”, abundó Yunus.
Aunque la tecnología brinda un gran apoyo para la comunidad, esto no significa que todo producto lo sea solo por ser novedoso. Durante la presentación del iPhone 7, su smartphone predecesor fue devaluado por casi cien dólares. Sin embargo, las diferencias entre ambos productos es que el nuevo teléfono no contaba con entrada auricular y el botón de inicio fue removido para ser únicamente táctil.
¿Por qué otras marcas como Lanix, HTC, LG, pueden contar con innovaciones en diseño superiores a la de Apple, pero su precio se mantiene accesible a un público de clase media? Simplemente por el nombre, pues Apple, Samsung entre otros apoyan sus ventas e ingresos por la imagen que este puede provocar a la comunidad. Y, con el aumento de personas aspiracionales que, con desafíos financieros y deudas bancarias, entran a dicho sector para obtener la nueva sensación tecnológica.
La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) predice que para la siguiente década el pequeño sector de pobres será olvidado y dejado atrás, mientras que la clase media crecerá en donde muchos usuarios contarán con productos de lujo.