Ante las amenazas que Donald Trump representa para la inversión en México, el país se coloca como una opción atractiva para inversionistas, en algunos casos, mejor que China.
Ciudad de México.- La respuesta más importante que hoy tiene el Estado Mexicano para incentivar la inversión, son las zonas económicas especiales (ZEE), comentó Gerardo Gutierrez Candiani, jefe de la Autoridad Federal para el Desarrollo de las ZEE.
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Por ello, el presidente Enrique Peña Nieto emitirá un decreto en la primera semana de febrero mediante el que brindará incentivos fiscales federales relacionados con el ISR, IVA, facilidades aduanales y la parte de seguridad social para las ZEE.
A nivel estatal, habrá incentivos relacionados con los impuestos de nómina, traslados de dominios, prediales, impuestos al hospedaje en el área de influencia y compras de gobierno.
De concretarse las medidas, los incentivos en México llegarán a ser incluso más atractivos que los que se ofrecen en China, lo que colocaría a las ZEE mexicanas “a nivel de las mejores prácticas mundiales”, aseguró el empresario.
De acuerdo con un comunicado de la Secretaría de Economía, las ZEE buscan cerrar las brechas regionales creando nuevos polos de desarrollo industrial que atraigan inversiones, generen empleos de calidad, desarrollen cadenas de valor, y detonen una demanda de servicios locales.
Ante las declaraciones de Trump, su paquete de medidas fiscales que contemplan la reducción de impuestos federales de 35 por ciento hasta 20 y 15 por ciento, y la reconfiguración de la economía a nivel mundial que han comenzado a disminuir las expectativas de que el ritmo de llegada de inversiones extranjeras en México, las ZEE representan una oportunidad para retener las inversiones.
A través del establecimiento de zonas económicas especiales, el gobierno pretende generar un mayor crecimiento y productividad en las entidades con mayor rezago económico, ubicadas específicamente en el sur y sur-este del país.
Las primeras zonas son la del Puerto Lázaro Cárdenas, que incluye municipios vecinos de Michoacán y Guerrero; la del Corredor del Istmo de Tehuantepec, que incluirá los polos de Coatzacoalcos, Veracruz, y Salina Cruz, Oaxaca; y la de Puerto Chiapas, en Chiapas.
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Con información de El financiero.