La devastación de que dejaron los huracanes Harvey e Irma a su paso por el Caribe y su llegada a principalmente a Texas y Florida, además de Katia en el Golfo de México y los daños provocados en Veracruz, no solamente afectaron a los pobladores de esas regiones sino que se prevé que esto tenga un impacto en el nivel de la inflación y el precio de combustibles y alimentos.
Ciudad de México.- Si creíamos que los huracanes ya habían terminado, parece que todavía siguen presentes pero ahora a nivel económico, ya que no solo dejaron devastaciones materiales y humanas, sino que son los causantes de que la inflación en México siga subiendo, contrario a lo que se esperaba para los últimos meses del año.
Según el reporte más reciente del Instituto Nacional de Estadística (Inegi), la inflación se ubicó en 6.66 por ciento en agosto, lo que representa su pico más alto en 16 años y que es evidente en el precio de los alimentos principalmente, lo que es un duro golpe para las economías de las familias.
Pero a pesar de que los reportes económicos de diversas instituciones financieras, incluyendo al Banco de México (Banxico), esperaban que para los últimos meses del año la tendencia a la alza de la inflación comenzará a mostrar una pendiente descendente, los acontecimientos recientes con respecto a los fenómenos meteorológicos que azotaron a Estados Unidos y algunas partes de México, pueden provocar un efecto contrario.
Incluso Agustín Carstens, gobernador del Banxico ha tenido que reconocer que la inflación general continuará ubicándose por encima de 6 por ciento en los próximos meses, aunque pareciera “estarse acercando a su techo”.
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Desabasto de combustibles y daños en producción agropecuaria
Y este fenómeno inflacionario se verá reforzado por los daños ocasionados por los huracanes Harvey e Irma, que tuvieron un poder destructivo mayor y que para algunos analistas económicos serán uno de los principales motivos de este comportamiento económico en México.
“El tema de los huracanes tendrá un impacto importante sobre todo en la parte de agropecuarios”, explicó en declaraciones para El Financiero Janeth Quiroz, subdirectora de análisis económico de Monex, considerando además de que los precios de frutas y verduras han sido uno de los que más se han elevado en los últimos meses.
Pero además de esto, el desabasto en los combustibles y gasolinas por el cierre de las refinerías en Estados Unidos al paso de los huracanes, también es otro factor determinante para que la inflación no presente un comportamiento distinto al que se tuvo en agosto pasado.
Cabe destacar que Texas es uno de los principales productores de combustibles en los Estados Unidos pero debido al huracán Harvey se detuvo la producción de 2.3 millones de barriles diarios, lo que generará que el precio de las gasolinas tengan movimientos a la alza.
Así, con estas condiciones, según lo considera Alejandro Cervantes, economista de Grupo Financiero Banorte, sus pronósticos son que la “inflación termine el año en niveles de 6.4 por ciento”, superior al 6.2 por ciento que habían calculado y “el motivo detrás de este cambio viene principalmente por los efectos meteorológicos en Estados Unidos”, dijo el especialista.