No hay sorpresas en la quinta ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y en esa misma medida las preocupaciones de los empresarios mexicanos continúan, ya que la postura de Estados Unidos no ha cambiado con respecto a las reuniones anteriores y esto complica el panorama futuro.
Ciudad de México.- Si bien todos quieren guardar un ambiente de calma y optimismo, la realidad es que hay pocos avances y las negociaciones siguen empantanadas en propuestas que solo el gobierno de Donald Trump consideran como viables y esto complica el accionar de las delegaciones de México y Canadá, que literalmente no ven soluciones a esto.
A tal punto que se han reservado su derecho de presentar contrapropuestas a temas como las reglas de origen del sector automotriz, pero a pesar de esto los empresarios que colaboran en el “Cuarto de Junto”, aseguran que trabajan en propuestas “creativas” para darle un giro más positivo a este encuentro que se celebra en la Ciudad de México.
Según Moisés Kalach, uno de los líderes empresariales en estas mesas de trabajo, los sectores productivos están “tratando traer cadenas de abasto que se nos han ido a otros lados, tratando de incentivar esas cadenas de abasto en nuestro país. Ésas son las formas que tenemos hasta ahora, pero no limitando comercio y por supuesto no haciéndole daño a nuestros sectores”.
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Una posición cerrada la de Estados Unidos
En este sentido, Kalach aseguró que no aceptarán propuestas que dañen o afecten el entorno de la economía mexicana o los productores nacionales, una vez que el gobierno de Estados Unidos sigue manteniendo sus planteamientos iniciales de tratar de frenar las cadenas de distribución de ciertos productos.
Sin embargo, en declaraciones que retoma El Financiero, el líder empresarial dio a entender que hay muy poco margen de acción, por lo que “tenemos que hacer es esperar a que vayan cerrando las mesas, que nos den retroalimentación los jefes negociadores, y en ese momento poder hablar y negociar las propuestas, entonces mejor hay que esperar a que cierren”.
Mientras que otras voces del mismo sector empresarial reconocen abiertamente la complejidad de la situación y a pesar de que esperan con optimismo un final feliz de estas mesas de trabajo, son realistas en el sentido de que la posición de Estados Unidos es muy difícil de cambiar.
“Es muy preocupante la posición de Estados Unidos, y esto que nosotros hemos estado comunicando, es resultado y a petición expresa de los empresarios, sobre todo de los norteamericanos, por las decisiones comerciales y políticas que ha tomado este gobierno”, manifestó en su momento la presidenta de la International Chamber of Commerce México (ICC MÉXICO), María Fernanda Garza Merodio.
Además de que señaló que en estos momentos, “el TLCAN es mucho más que un tratado de libre comercio, es la piedra angular de la relación entre los tres países”, por lo que recomendó ” mantener una visión amplia porque lo que buscamos es expandir el comercio y no que se restringa”, afirmó Garza Merodio.