El tiempo pasa y no hay avances significativos, siguen los mismos reclamos de Estados Unidos hacia México y Canadá de no querer negociar seriamente el acuerdo trilateral y la quinta ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) se va con muy pocos acuerdos y con la única esperanza de que en enero próximo las cosas cambien.
Ciudad de México.- En términos objetivos nadie esperaba grandes cambios en las dinámicas en las que se han desarrollado las mesas de trabajo del TLCAN, sobre todo cuando ninguno de los ministros estuvo presente en la quinta ronda en la Ciudad de México, pero el hecho es que ya se acabó prácticamente el 2017 para los calendarios de las negociaciones y éstas apenas tienen alguna muestra de avance.
En este caso, Ildefonso Guajardo Villarreal, secretario de Economía, consideró que esto “no es estancamiento, porque hay una serie de capítulos que están cerca de cerrarse”, como facilitación comercial, comercio electrónico, obstáculos técnicos al comercio y en varios anexos sectoriales, lo que representan casi el 25 por ciento de los textos para modernizar el TLCAN.
Con un tono más optimista que en ocasiones anteriores, el funcionario mexicano comentó en declaraciones que retoma Notimex, que “el asunto de cerrar o avanzar depende de la voluntad política de los equipos negociadores” y consideró que es solo “cuestión de ponernos de acuerdo”, pero no descartó un panorama negativo y pidió “estar también listos a un escenario donde no necesariamente se tenga una conclusión”.
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Estados Unidos no cambia su postura
Y a pesar del optimismo mostrado por Guajardo, su contraparte estadounidense no quedó tan complacido de los resultados en esta ronda de negociación y siguió presionando mediáticamente para hacer ver a la opinión pública, que la falta de acuerdo es por la faltad e voluntad de México y Canadá de aceptar sus propuestas.
Robert Lighthizer, representante comercial de Estados Unidos, afirmó nuevamente que sus socios no se toman “en serio” esta negociación y afirmó que un “un TLCAN reequilibrado y actualizado, promoverá mayor prosperidad para los trabajadores, agricultores, ganaderos y empresarios estadounidenses, y fortalecerá a América del Norte en su totalidad”.
Sin embargo, en estas mesas de trabajo celebradas en la Ciudad de México, se hizo aún más visible las diferencias que hay en temas como las reglas de origen de la industria automotriz, la cláusula “sunset” y los relacionados con las cuestiones agrícolas.
No hay que ponernos nerviosos
Así, todo queda pendiente para la próxima reunión pactada a realizarse del 23 al 28 de enero de 2018 en Montreal, Canadá, donde el ambiente será más denso y habrá más presión debido a los cercanía de los plazos para lograr u acuerdo conjunto y continuar con este tratado comercial.
“Ese será un momento donde los grandes temas se tendrán que empezar a definir, pero o nos pongamos nerviosos, es un proceso que corresponde a algo que es complejo, pero lo más importante es estar comprometidos con una negociación que cierre constructivamente”, afirmó Ildefonso Guajardo Villarreal.