El panorama parecía muy complicado pero la economía de México superó los retos en 2017 y este año será más positivo, así lo considera el Grupo Financiero Banorte, ya que basa sus proyecciones en un mayor crecimiento, menos inflación, estabilidad en los precios de los combustibles y un aumento en la producción petrolera, lo que hace que este año “pinte mejor” a pesar de los factores de riesgo existentes.
Ciudad de México.- Sin duda las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) sigue siendo un factor de incertidumbre y de riesgo para la economía nacional, pero a pesar de esto, México tendrá un mejor desempeño en 2018 y se presentará un ambiente más favorable para su crecimiento.
Luego de vivir una de las inflaciones más altas de los últimos 16 años al llegar a 6.7 por ciento en diciembre pasado, Banorte considera que comenzará a bajar en este año y presentará un descenso pasando por un 5 por ciento inicial hasta concluir el año con un probable 4.1 por ciento.
Así, 2018 será “un año de menor inflación y más crecimiento, y los dos factores que impulsarán a la actividad económica mexicana serán la producción petrolera y el gasto electoral”, señaló Gabriel Casillas Olvera, analista en jefe de Grupo Financiero Banorte.
Esto será un avance importante que tendrá un impacto positivo en la economía familiar, ya que al cierre de 2017 algunos productos básicos subieron más del 10 por ciento y algunos alimentos y verduras alcanzaron un alza de hasta 40 por ciento, reduciendo el poder adquisitivo de las personas.
En este sentido, el analista considera que en 2017 se conjunto “un incremento bien importante por el lado de los precios de la gasolinas y el gas LP, con un ciclo agropecuario muy extraño y con transmisión de costos rezagados de depreciaciones del tipo de cambio”, pero a pesar de esto, México reaccionó bien y se espera que estos factores ya no se presente en 2018.
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Más crecimiento económico y más producción de petróleo
Dado que se espera un entorno más favorable a pesar de que existen las condicionantes del TLCAN, las elecciones presidenciales y los posibles efectos de la reforma fiscal de Estados Unidos en México, Banorte asegura que “2018 pinta mejor” y estima que la economía crecería en este 2.5 por ciento desde el 2.0 por ciento en 2017.
Pero esta proyección se basa en gran medida en el aumento de la producción petrolera, que según Casillas, se “estabilizará” en 1.9 millones de barriles de crudo al día, “con lo cual ya no le restará crecimiento a la economía nacional, como lo ha hecho en los últimos cinco años”.
Aunado a esto, el tipo de cambio jugará un papel crucial en el desempeño económico del 2018, ya que en el año pasado tuvo caídas en su cotización que alarmaron a los mercados, al tocar niveles máximos históricos de 22 pesos por dólar, para posteriormente concluir el año previo sobre una paridad de 19 pesos por unidad.
Sin embrago, “el tipo de cambio, al ser flexible, logró absorber los choques externos a diferencia de otras etapas de la historia del país, cuando las variables económicas afectadas por factores del exterior llegaron a ser temas de empleo o el mismo rumbo de la economía”, concluyó Casillas en declaraciones que retoma Notimex.