Con la llegada de un nuevo gobierno, las reformas estructurales seguirán siendo claves para el país y no solo se deben mejorar las existentes, sino buscar nuevos espacios para implementar cambios que generen mayor desarrollo y ayuden a combatir la desigualdad.
Ciudad de México.- El mundo ha entrado en una etapa en donde el modelo de libre comercio ha encontrado barreras nunca antes vistas, esto complica el desempeño económico de los países exportadores y en el caso de México, también puede frenar las inversiones.
Por tal motivo, algunos expertos señalan que se deben crear las condiciones necesarias para que el país pueda enfrentar las exigencias actuales, ajustarse a los cambios y responder de manera ordenada tanto a las necesidades internas, como a las que se generan a nivel global.
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Aumentar las exportaciones
En ese sentido, el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su Reporte sobre el Sector Externo 2018, afirma que las reformas estructurales serán básicas para aumentar las exportaciones y equilibrar la balanza comercial, en medio de un entorno de recesión y de medidas proteccionistas.
“México requiere de más reformas estructurales para mejorar la competitividad y fortalecer las exportaciones, con el propósito de impulsar el crecimiento y mantener la sostenibilidad externa en el mediano y largo plazo”, dice este organismo internacional en información que retoma El Financiero.
De acuerdo a cifras de este reporte, México mantuvo un déficit de la cuenta corriente en 2017 de 19 mil 400 millones de dólares, equivalentes a 1.7 por ciento del PIB nacional.
Además, el FMI también considera que “la incertidumbre sobre las futuras relaciones comerciales con los Estados Unidos contribuyó a la disminución de la inversión privada, mientras que la inversión pública siguió cayendo debido a menores inversiones de Petróleos Mexicanos (Pemex)”.
Por tal motivo, mantener y mejorar las reformas estructurales para consolidar las inversiones en el sector energético, debe ser una de las prioridades del siguiente gobierno, en donde según cifras oficiales, se esperan 181 mil millones de dólares.
Más reformas en otras áreas
Pero miembros del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), consideran que las reformas existentes tienen espacio para ser mejoradas y que hay otros ámbitos en donde es urgente hacer modificaciones legales.
Uno de ellos es la reforma fiscal, que “si bien fue muy exitosa en materia regulatoria y ha logrado eliminar la dependencia de los ingresos del petróleo, requiere incorporar más sujetos al padrón de contribuyentes”, asegura este instituto.
Otro aspecto en donde el gobierno de Andrés Manuel López Obrador debe poner atención, es el sistema de pensiones, ya que se ha convertido en un problema para las finanzas públicas y se necesita modificar mediante alguna reforma de fondo.
Según el IMEF, esto debido a que el sistema de pensiones y jubilaciones “tiene un costo que a la larga sería insostenible para el país, por lo que requiere una atención inmediata del nuevo gobierno”.
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Cerrar brechas en desigualdad social
Pero uno de los principales aspectos de la implementación de las reformas estructurales, es que pueden ser un mecanismo para cerrar las brechas sociales existentes en el país, combatir la pobreza y mejorar la calidad de vida de los mexicanos.
Tal como lo señaló el presidente Enrique Peña Nieto, “si bien no hemos crecido al potencial que tiene México”, el mandatario aseguró que hay posibilidades de mejorar gracias a “los cambios estructurales que implementamos en distintos sectores de la economía”.
En ese sentido, las reformas estructurales son los “nuevos cimientos que permiten que el país tenga desarrollo y prosperidad”, concluyó Peña Nieto.