Jesús Seade ya participa en las negociaciones sobre el tratado trilateral y su presencia ha sido bien recibida en los círculos de alto nivel, sobre todo porque el mensaje que ha enviado a Trump es de flexibilidad en el TLCAN.
Ciudad de México.- El presidente electo Andrés Manuel López Obrador espera que para el inicio de su mandato, las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) estén en un punto de acuerdo máximo.
Para ello ha designado a Jesús Seade Kuri como representante del nuevo gobierno y de manera inmediata, ya participa en las reuniones de trabajo que oficialmente se reanudaron entre México y Estados Unidos luego de un mes de estar estancadas.
Al acompañar al equipo del gobierno actual en las reuniones celebradas en Washington, donde acudieron el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, y Luis Videgaray, secretario de Relaciones Exteriores, el enviado de AMLO ratificó su postura al respecto.
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Coincide con postura oficial
Tras estar presente en las mesas de trabajo, Seade aseguró que “fue una buena reunión” y franqueando al secretario de Economía, aseguró que lo más importantes es que “conciliamos ideas” con respecto a la postura que ha mantenido el gobierno mexicano.
Esto coincide con las declaraciones que había hecho en los días previos, en donde señaló que una buena negociación del TLCAN implica cordialidad de las partes y también, eliminar las amenazas y las presiones hacia México.
Al respecto, Seade Kuri aseguró en su momento que “el pueblo mexicano no debe funcionar bajo amenazas” y que si bien considera que en un mes o un par de meses puede haber un acuerdo final, “el objetivo es llegar a una negociación exitosa” y no de rapidez, como lo ha señalado el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
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Oferta para flexibilizar temas polémicos
Pero Jesús Seade también ha llevado un mensaje conciliador y mantiene la postura de flexibilizar algunas peticiones para destrabar las negociaciones.
En una entrevista que concedió para el diario The Wall Street Journal, afirmó que hay particularmente dos temas en los que estarían dispuestos a ceder y son las reglas de origen del sector automotriz y el correspondiente a los mecanismos de resolución de controversias entre empresas y el Estado.
Seade declaró que “deberíamos estar dispuestos a explorar opciones y alternativas que darían certeza a las empresas y buscar una posición intermedia sobre las reglas de origen para los automóviles”.
Además, agregó que esta postura se debe a que “después de un año, las cosas no han cambiado tanto” y “los temas controvertidos siguen ahí”, por lo que “toda la negociación tiene que evolucionar y ahora tenemos que iniciar negociaciones de cierre”.
Pero de la misma manera señaló que hay algunas “líneas rojas” provenientes de Estados Unidos y en los que no están dispuestos a ceder.
Según declaraciones que retoma Expansión, estos temas serían la cláusula de extinción o sunset; los aranceles estacionales a productos agrícolas de México y la eliminación de paneles para resolver disputas entre los miembros del pacto”.