Para todo proyecto emprendedor, uno de sus principales objetivos es permanecer en el mercado y contar con fondos para poder operar, pero si buscas inversionistas para tu startups, no te dejes engañar por estafadores.
Ciudad de México.- Hasta hace pocos años, las pequeñas y medianas empresas se constituían, creían y algunas veces morían siempre con la persona que la fundó como la única dueña. Ahora las cosas han cambiado y con los nuevos modelos de financiamientos e inversiones, una startups puede rápidamente crecer y cambiar de socios según sus necesidades.
Y siempre se desconfía del emprendedor que anda en la búsqueda de inversionistas, juzgan su proyecto y la viabilidad en el mercado; sin embargo, sucede que en muchos casos las personas que ponen el dinero y las condiciones, no tienen buenas intenciones y no les interese hacer crecer el proyecto.
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Contar con buena asesoría legal
La necesidad y la urgencia obligan a los emprendedores a tomar medidas desesperadas con tal de solventar la crisis, pero esto puede ser contraproducente e incluso matar por completo a su empresa.
Tal como lo señala Alejandro Lomas, CEO de Startcups Incubator & Accelerator Maniging Partner de Caffeine Ventures, “no todos los problemas vienen de parte el emprendedor, también algunos inversionistas tienen cola que les pisen y es más común de lo que te imaginas”.
Por tal motivo, es prioritario que las startups o las pequeñas empresas cuenten con un asesor legal de confianza, que los acompañe en el proceso y que revise a fondo los contratos, las cláusulas, los tiempos y las letras chiquitas, así no habrá ninguna sorpresa futura.
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No apresurarse a firmar nada
Por otra parte y a pesar de las prisas por concretar las inversiones, otra recomendación es no apresurarse a firmar ningún papel ni documento hasta que las cosas estén totalmente claras y que representan condiciones benéficas para las dos partes.
Así, Alejandro Lomas advierte en un texto para Entrepreneur, que no es recomendable “firmar estatutos sin antes leerlos y sobre todo, siempre verificar la valoración, experiencia y recomendación del fondo de inversión o ángel inversionista con el que te vas a casar durante un tiempo determinado”.
Esto debido a que en algunas ocasiones, fallan con el acuerdo pactado de depositar las sumas acordadas en el plazo determinado, poniendo en doble desventaja a las empresas, que ya no pueden recurrir a otros inversionistas y la irresponsabilidad de su “ángel” los puede llevar a la ruina.
Finalmente y para prevenir esta situación, el experto señala que como esto es “más común de lo que te imaginas”, lo mejor es “solicitar capital solo por un plazo de operación de 12 meses, con la finalidad de levantar una nueva ronda de inversión cada año”.
Con esto, se logra tener un respaldo financiero y legal para poder actuar en caso de incumplimiento del contrato por parte del inversionista y buscar nuevas alternativas de financiamiento en un periodo corto de tiempo.