Gracias a la estructura con que se incrementó la deuda de la Ciudad de México, esta no colapsó la economía de la capital del país, a pesar de su magro crecimiento en comparación con otras entidades, cuyos pasivos si perjudicaron en sus finanzas.
Ciudad de México.- La Ciudad de México tiene una deuda total de 67 mil 424.3 millones de pesos, mientras que su crecimiento, medido en porcentaje, apenas alcanza el 0.7% comparado con el mes anterior.
La Secretaría de Hacienda declaró que fue gracias a la estructura confortable que el DF no se declaró en quiebra como ocurrió con Nuevo León. Y es que tras revisar el contraste entre el crecimiento económico de la capital del país y el nivel de endeudamiento, realmente se tiene que reconocer la habilidad de los funcionarios que lograron estructurar los pasivos ya que el comparativo entre lo que se debe y lo que se creció, resulta magro comparado con otros estados.
Tomando como referencia Nuevo León, mientras que su deuda asciende a 61 mil 077 millones de pesos, su crecimiento económico comparado con junio fue de 1.2% mientras que comparado con el mismo periodo de 2014 este fue de 6.3%.
En los mismos periodos, la Ciudad de México solamente tuvo un crecimiento de 0.7% y 2.2% respectivamente, mientras que la deuda comparada con el estado regiomontano es seis mil 347 mdp mayor.
Alertas a diputados sobre gasto de deuda contratada
A comienzos del año, en la Cámara de Diputados se aprobó un dictamen en materia de disciplina financiera en la que se incluye al Distrito Federal, a fin de regular su endeudamiento, con lo que queda en manos del Congreso la facultad para aprobar de manera anual los montos de endeudamiento que aparecerán en la Ley de Ingresos; quedándole al Ejecutivo Federal el reporte sobre cómo se ejerció la deuda.
En el caso del DF, el jefe de gobierno le hará llegar el informe que sobre el ejercicio de los recursos correspondientes hubiere realizado, e informará igualmente a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, al rendir la cuenta pública.
La medida aprobada en San Lázaro faculta a los diputados a recibir “alertas” sobre manejo de la deuda, así como las sanciones aplicables a los servidores públicos que no acaten las disposiciones.
Actualmente, el artículo 117 establece que los estados y los municipios no podrán contraer obligaciones o empréstitos sin que éstos se destinen a inversiones públicas productivas y a su refinanciamiento o reestructura, mismas que deberán realizarse bajo las “mejores condiciones del mercado”.
Por Octavio N. Cervantes.