Para nadie es un secreto el nivel de influencia que tienen las imágenes y el contenido visual en nuestro cerebro, esto puede determinar la interpretación de lo que vemos y lo que suponemos son las cosas, creando todo un escenario que puede ser agradable o incómodo dados nuestros valores y prejuicios, de ahí la importancia de entender que la imagen de una empresa se resume en un buen logotipo comercial.
Ciudad de México.- Debido a la conformación de nuestro cerebro y la manera en que procesa la información que recibe, la cuestión visual es una gran herramienta para las empresas de crear un lazo profundo con las personas y los clientes, todo puede comenzar con una simple imagen que sea la representación gráfica de lo que es la empresa, a lo que se dedica y lo más importante, lo que les ofrece a los clientes.
De acuerdo a cifras científicas que retoma el sitio Puro Marketing, el cerebro puede procesar hasta 77 imágenes por minuto, lo que en teoría significa que la interpretación de la información que recabe se basará más en esto que las palabras o textos.
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De esta manera, la imagen de una empresa se resume en un buen logotipo comercial y por más que parezca algo simple de realizar, conceptualizar todo lo que implica la organización, sus valores, pretensiones en el mercado y la filosofía empresarial no es fácil, por lo que todo lo anterior debe de estar representado en esa serie de trazos, colores y formas que el cliente verá de forma cotidiana.
En pocas palabras, elegir un mal concepto de logotipo puede ser un factor que aleje a los clientes y tal como lo señala este portal, “un mal logo puede arruinar un negocio”, de ahí la necesidad de darle la importancia correcta y trabajar de la mano de profesionales para que denote y connota de manera precisa lo que se quiere transmitir; sin confusiones ni malas interpretaciones.