El presidente mexicano está haciendo su parte en lo que a la negociación del TLCAN se refiere y, en la búsqueda por fortalecer comercio con otros mercados, llega a China a hablar con Xi Jinping de inversión y turismo.
La pareja presidencial mexicana aterrizó el domingo en China para realizar una visita de Estado con el gigante asiático, en un momento en el que su comercio exterior enfrenta un panorama incierto por las diferencias planteadas en las mesas de discusión que enmarcan la negociación del TLCAN.
Por más de 20 años México enfocó su mercado a la relación comercial que sostiene, hasta hoy, con Estados Unidos, convirtiendo a su vecino del norte en su principal socio comercial; sin embargo, con la llegada de Trump a la Casa Blanca y su insistencia de llevar a revisión el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el gobierno mexicano se ha visto obligado a buscar otros horizontes y despertar esos acuerdos mercantiles que ha firmado con otros países.
En línea de lo anterior, el presidente mexicano, Enrique Peña, viajó a Asia para reunirse con su homólogo chino y para participar en la Cumbre de Economías Emergentes y Países en Desarrollo, reconocieron los progresos logrados en los últimos años, como el acceso de productos mexicanos al mercado chino, entre ellos la carne de cerdo, el tequila, berries, entre otros productos.
En su reunión Enrique Peña Nieto, y de China, Xi Jinping, dialogaron sobre los avances logrados en los últimos años en ámbitos prioritarios de la relación bilateral, como el comercio, la inversión y el turismo.
Ambos mandatarios conversaron sobre el inicio de las operaciones en México, en junio de 2016, del Banco de Industria y Comercio de China (ICBC) y del Banco de China, así como de la ampliación de la conectividad aérea, con el inicio de operaciones del vuelo Guangzhou-Vancouver-Ciudad de México, de China Southern Airlines, primera aerolínea china en establecer una ruta de pasajeros a México.
Como era de esperarse y siendo México uno de los principales afectados por el proteccionismo de Donald Trump, ambos presidentes refrendaron su voluntad por defender el libre comercio, en el marco de un sistema multilateral basado en reglas claras.
El mandatario mexicano enfatizó que en el inicio de la renegociación del TLCAN la posición de México seguirá siendo seria y constructiva, poniendo el interés nacional por delante y buscando un resultado en el que los tres países ganen.
México busca consolidar a la brevedad sus relaciones comerciales con otros mercados fuera del TLCAN. Ante un eventual resquebrajamiento del acuerdo, le comercio mexicano busca tener opciones sólidas que ofrecer a los inversionistas antes del cierre del 2017.