El dirigente de la OCDE José Ángel Gurría sostuvo que las reformas son para “emparejarnos” con otros países.
Ciudad de México.- Aunque “admirable”, el paquete de reformas sólo nos pondrá a la par con otras naciones, lo anterior, de acuerdo a las declaraciones del secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría.
Destacó además que en la próxima reunión de la Orgnización en Davos, no habrá ningún presidente que vaya a mostrar tan buenos resultados como Enrique Peña Nieto. Sin embargo, también sostuvo que “muchas de estas reformas son para ponernos a la altura, a mano y emparejarnos -con otros países-, no es para liderear el mundo”.
Gurría recordó que había un déficit de reformas y que muchas de estas iniciativas estaban pendientes desde hace medio siglo y otras tenían 17 años de atraso.
“Si las cosas van bien, Peña Nieto podría pasar a la historia como uno de los grandes reformadores de los últimos 100 años”, dice el analista político Raymundo Riva Palacio, “pero si no, será un fracaso monumental”.
Las reformas que incluyeron educación, telecomunicaciones, impuestos y energía. Para Pierpaolo Barbieri y Niall Ferguson del Wall Street Journal, las reformas ponen a México en el umbral de transformarse “del lastre de América Latina al motor de crecimiento de Norteamérica”.
De acuerdo con la revista Forbes, la reforma energética es la más importante pues abriría la puerta para obtener 45,000 millones de barriles gracias a la inversión de empresas extranjeras que se especializan en extracción. El grupo Americas Market Intelligence con sede en Miami, comenta que esta reforma podría hacer de México en uno de los destinos más importantes para inversiones.
Según el periódico The Guardian, aún en las predicciones más optimistas, la mayoría de los mexicanos no verá beneficios directos de las reformas sino hasta año y medio después de su implementación. Tomará años para que el PIB supere el 1.3% que se preveía para 2013, y se reduzca un poco la pobreza que afecta a la mitad de la población.