El banco británico HSBC anunció este viernes que está estudiando la posibilidad de vender sus actividades en Brasil, aunque por el momento, no ha tomado una decisión al respecto.
Ciudad de México (Reuters).- HSBC Holdings Plc evalúa la posibilidad de vender su unidad brasileña esto, luego de que la división del banco español Santander revelara que está considerando una potencial compra.
HSBC dijo el viernes a través de un comunicado que está “evaluando varias opciones estratégicas”, incluyendo la venta de sus operaciones brasileñas, aunque todavía no ha tomado ninguna decisión.
El presidente ejecutivo de Santander Brasil, Jesús Zabalza, dijo esta semana que el prestamista estaba estudiando los términos de compra del negocio, aunque sostuvo que quería ver los detalles antes de tomar una decisión.
El presidente ejecutivo de HSBC, Stuart Gulliver, dijo en febrero que los cuatro negocios del banco que están generando problemas (Brasil, México, Turquía y Estados Unidos) necesitaban mejorar o serían vendidos.
Las ofertas por la unidad no podrían superar su valor contable, que se estima alrededor de los tres mil 300 millones de dólares.
De acuerdo con Reuters, además de Santander Brasil, también han expresado interés en la unidad Banco Bradesco, BTG Pactual, el canadiense Bank of Nova Scotia y el chino ICBC.
Las divisiones de HSBC en Brasil y Turquía son grandes negocios pero no están entre los cinco principales bancos en ninguno de los dos países.
Las pérdidas de HSBC
HSBC perdió 247 millones de dólares en Brasil y 64 millones en Turquía el año pasado, debido a que las pérdidas en la banca minorista contrarrestaron las ganancias en la banca de inversión en ambos países.
Está previsto que Gulliver ofrezca detalles sobre potenciales ventas el 9 de junio, como parte de sus esfuerzos por reducir costos y simplificar el banco.
Los esfuerzos de Brasil
Hablando en un evento del banco central en Río de Janeiro, Christine Lagarde, responsable del Fondo Monetario Internacional, dijo que el reciente ajuste monetario brasileño ya ha servido para controlar las expectativas de inflación.
“Los esfuerzos de Brasil para incrementar sus ahorros del superávit primario son cruciales para que el país recupere la confianza de los inversores”, aseguró Lagarde.