En manos equivocadas, el Número de Identificación Personal (NIP) puede representar un riesgo para las finanzas, por ello hay que crear uno seguro, recomendó la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Ciudad de México – El organismo señaló que el llamado NIP es una serie de cuatro, ocho o hasta 12 dígitos que se requieren al momento de pagar con tarjeta de crédito, para acceder a cuentas bancarias o para ingresar a ellas desde un dispositivo móvil.
En el caso de las cuentas bancarias, es común que se tenga un NIP de cuatro dígitos, pero hay que crear uno seguro “antes de que quieras anotarlo hasta en la pared para memorizarlo”, subrayó en su publicación “Consejos para tu bolsillo”.
Para ello, recomendó elegir como NIP una contraseña que personalmente sea fácil de identificar, pero difícil de adivinar para otros, para lo cual “por ningún motivo utilices fechas de nacimiento, aniversarios de boda o números telefónicos, ya que además de ser obvios, son datos que se pueden prestar para el robo de identidad”.
Además, hay que elegir diferentes combinaciones, ya que, aunque parezca más sencillo memorizar un solo NIP que recordar diferentes claves o contraseñas, lo recomendable es no tener la misma para diferentes cuentas.
Aconsejó no decir a nadie este número, incluso si son personas de entera confianza, por ningún motivo hay que prestarle la tarjeta o compartir el NIP de seguridad, “resguarda este número como un tesoro porque no te gustaría tener que pagar una deuda por algo que no compraste”.
Recomendó tener precaución al momento de digita el NIP en el cajero, para lo cual hay que procurar cubrirlo de manera que sea imposible que otros vean la clave; nunca aceptar ayuda de extraños y antes de insertar la tarjeta, revisar que el cajero no tenga dispositivos físicos que se puedan retirar.
El organismo sugirió no guardar el NIP, sino hacer un ejercicio de memoria, aprenderse bien la clave y procurar no escribir el número en ningún lado, mucho menos en la tarjeta.