Ruiz Esparza pasó de tener sólo un departamento de 149 metros cuadrados de construcción habitable en 2012, a ser ahora el dueño de seis departamentos.
Gerardo Ruiz Esparza, secretario de Comunicaciones y Transportes ha adquirido un total de cinco departamentos de 2013 a 2015, apenas un año después de ingresar al gabinete el presidente Enrique Peña Nieto.
De acuerdo con Sin Embargo, el patrimonio de bienes inmuebles de Esparza creció a un ritmo de 1.6 viviendas por año y sus propiedades van de los 182 a los 219 metros cuadradas, mismas que han sido pagadas todas al contado.
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Adicionalmente, el encargado de la infraestructura del país ha vendido cuatro casas que pagó al contado en 1983, 2004, 2007, y 2010 y los reportes indican que en los últimos 10 años ha tenido en su haber por lo menos cinco bienes inmuebles.
El titular de Comunicaciones y Transportes se encuentra en el ojo público luego de que el pasado 12 de julio se abriera un socavón de 8 metros de diámetros en el Paso Exprés en Cuernavaca. El incidente cobró la vida de dos personas, un padre y su hijo, lo que ha generado que legisladores de todos los partidos de oposición e incluso el exdirector del SAT, Aristóteles Núñez, hayan pedido su renuncia.
Ruiz Esparza pasó de tener sólo un departamento de 149 metros cuadrados de construcción habitable en 2012, cuando fue llamado al Gobierno federal para trabajar en el gabinete de Peña Nieto, a ser ahora el dueño de seis departamentos.
Cabe destacar que ha sido el propio funcionario quien ha dado cuenta de la compra de sus propiedades y la venta de sus casas en su declaración patrimonial presentada ante la Secretaría de la Función Pública. Sin embargo, en su última declaración, la del mes de mayo, Ruiz Esparza declaró sólo “parcialmente” sus datos patrimoniales.
El funcionario indicó que no especificaría sus ingresos netos por actividad industrial, comercial, financiera y otros, además de que no pondría el valor ni de las transacciones ni si están en pesos, dólares o euros los cinco departamentos que ha comprado al contado, así como sus bienes muebles y vehículos.
El portal Sin Embargo apunta que Esparza tampoco aceptó presentar en su declaración inversiones, cuentas bancarias y otro tupo de valores, así como adeudos, el monto original ni el saldo de los mismos.
Es importante señalar que por ley los funcionarios mexicanos deben declarar bienes, intereses y obligaciones fiscales, pero esta declaración es pública sólo en caso de que el funcionario así lo decidiese, es decir, los servidores públicos comparten con los ciudadanos sólo la información que decidan conveniente.