La noche de hoy se cubrirá, si el clima lo permite, con las Lágrimas de San Lorenzo, nombre con el que también se conoce a la lluvia de estrellas Perseidas.
Ciudad de México (elsemanario.com).- Hoy en el cielo de la media noche podrán observarse las Lágrimas de San Lorenzo, como también se le conocen a las Perseidas o “lluvia de estrellas”.
Todo el hemisferio norte podrá disfrutar de este espectáculo sin la necesidad de contar con equipos especiales, pues con sólo alzar la vista los desvelados podremos apreciar hasta dos meteoritos por minuto. Esto según el astrónomo Eddie Ariel Salazar, quien sostiene que
“la lluvia de estrellas que emanan de la constelación de Perseo se debe a los residuos que a su paso dejó el cometa Swift Tuttle 1862 II, el cual volvió en fechas posteriores, como el 15 de diciembre de 1992, lo que alimentó al fenómeno”.
Como dato curioso, se les llama Perseidas pues la zona del cielo en donde pareciera que surgen estos meteoritos es justamente en la constelación de Perseo; además, el astrónomo refiere que este fenómeno es uno de los que mayor misticismo tiene a su alrededor, tanto para la religión maya como para la católica:
“Se trata de una de las lluvias de estrellas más antiguas, pues los chinos la registraron hace dos mil años aproximadamente, y es obvio que los sacerdotes-astrónomos mayas también se percataron de éste acontecimiento, sólo que se carece de documentos”.
Un dato más, el astrónomo yucateco dice que está mal llamar a este fenómeno como “lluvia de estrellas”; debe ser llamada “lluvia de meteoritos” y cabe destacar que el periodo de este fenómeno abarca del 16 de julio al 24 de agosto, aunque llega a un punto máximo aproximadamente el 11 de agosto; en este caso, será entre el 12 y 13 pues el universo no es estático, es dinámico y cambiante.
Como sea, el fenómeno podrá disfrutarse en todo el país, según el Instituto de Astronomía de la UNAM:
#Perseidas la noche del miércoles. No son necesarios telescopios, visible en todo México. http://t.co/bXYx34MuvV pic.twitter.com/hD4WITENUH
— Inst Astronomía UNAM (@iaunam) agosto 11, 2015
Esperemos que Tláloc y el cielo sean complacientes con este fenómeno y se vuelvan cómplices de una noche estrellada.