Richard Hanna y hermanos Koch se convierten en los primeros republicanos en anunciar su apoyo a la candiata demócrata Hillary Clinton.
Washington, Estados Unidos.- La candidata demócrata electa para la siguiente elección presidencial en EE.UU., Hillary Clinton suma a su campaña el soporte de valiosos y poderosos republicanos, el cual han declarado publicamente su apoyo incondicional.
Los hermanos Koch, los millonarios industriales, el domingo por la noche durante una entrevista para el NYT, declararon que votarán por la candidata demócrata.
La dinastía Koch, cuenta con un fondo político de casi 300 millones de dólares, se han ganado una reputación como poderosos aliados de los republicanos.
Mientras que del lado del congreso, el diputado republicano Richard Hanna se ha convertido en el primer miembro del Congreso de Estados Unidos en declarar públicamente que votará por Hillary Clinton en las elecciones del próximo 8 de noviembre, tras considerar que el candidato de su partido, Donald Trump, no es apto para liderar el país.
Hanna hizo el anuncio en declaraciones al periódico “The Post Standard” de Siracusa, en las que descalificó al magnate por sus comentarios contra la familia de un soldado estadunidense-musulmán, caído en la Guerra de Irak.
“Vi eso y me sentí indignado. Estaba atónito por la insensibilidad de sus comentarios”, aseguró Hanna al referirse a las declaraciones que hizo Trump a Khizr y Ghazala Khan, los padres del militar, en el sentido de que las creencias de del oficial no deberían estar permitidas en el ejército de Estados Unidos.
Hanna se suma a la lista de influyentes políticos conservadores del más alto nivel que dieron la espalda a Trump, entre ellos los ex presidentes George H.W. Bush, George W. Bush; el exgobernador de Florida, Jeb Bush; el senador de Arizona, John McCain; además del ex candidato presidencial y exgobernador de Massachusetts, Mitt Romney.
Los multimillonarios hermanos Koch rechazaron contribuir a la campaña presidencial del candidato republicano Donald Trump, argumentando que su dinero estará mejor gastado tratando de influir en la competencia por los escaños en el Congreso de Estados Unidos.
Este rechazo niega al empresario neoyorkino una gran fuente de financiamiento y refleja cómo su campaña poco ortodoxa está generando inquietud entre los financistas que normalmente apoyan al abanderado republicano.
Los Koch, que tienen un fondo político de casi 300 millones de dólares, se han ganado una reputación como poderosos aliados de los republicanos.
El proteccionismo comercial de Trump y sus propuestas para revisar tratados de libre comercio y endurecer las reglas de inmigración han chocado con las posturas de libre mercado de los Koch.
Un grupo de ricos donantes republicanos, que pagan un mínimo de 100 mil dólares por año para ser uno de los 700 miembros de la red política de los Koch, habían pedido a los hermanos que se involucraran en la elección y respaldaran a Trump, así lo indicó la agencia de noticias Reuters.