Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, España, Estados Unidos, México, Perú, Paraguay, Colombia y Panamá han rechazado las elecciones venezolanas.
Como estaba previsto, este domingo se llevaron a cabo en Venezuela las elecciones de la Asamblea Constituyente, en una jornada marcada por el desencanto, la violencia y los cuestionamientos cada vez más fuertes de la comunidad internacional.
Se estima que nueve de cada 10 electores en Venezuela se negaron a participar en la votación, lo que significa una participación menor al 15%, y hasta el momento los gobiernos de España, Perú, Costa Rica, Colombia, Panamá, Argentina y Brasil, México y Estados Unidos han anunciado que no reconocerán los resultados de la elección.
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A pesar de que el gobierno de Maduro anunció que quedaban prohibidas todas las protestas que pusieran en riesgo los comicios, este domingo estuvo marcado por los violentos choques entre manifestantes y fuerzas de seguridad que dejaron al menos 15 personas fallecidas, entre ellas dos menores de edad, y decenas de heridos.
¿Qué se votó este domingo?
El presidente Nicolás Maduro ha enfrentado las semanas más críticas desde que iniciaron las protestas opositoras hace tres meses, luego de que propusiera un plan para reescribir la Carta Magna del país.
Para este fin, promovió una jornada electoral en la que se eligieron a las 545 personas que se reunirán para dar inicio a la reforma de la Constitución, 18 años después de que el entonces recién elegido presidente Hugo Chávez promoviera una nueva Carta Magna.
Los esfuerzos de Maduro, sin embargo, ocurren en medio de las más intensas protestas opositoras en Venezuela, y la oposición acusa a las elecciones de este domingo de fraudulentas, además de criticar al gobierno por no tomar en cuenta una consulta popular en la que más de 7 millones de venezolanos votaron contra La Constituyente.
Las reacciones
Por el momento, destaca Excélsior, varios países de la región como Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, España, Estados Unidos, México, Perú, Paraguay, Colombia y Panamá han rechazado las elecciones venezolanas y advirtieron que no reconocerán los resultados.
También ha habido reacciones fuera de América, el gobierno español apuntó en un comunicado que “Estudiará, junto con sus socios de la Unión Europea y países amigos de la región, las medidas adicionales que puedan ser efectivas para promover una restauración de la institucionalidad democrática”.
El rechazo más grande, sin embargo, vino de Estados Unidos. De acuerdo con El País, EU analiza ampliar las sanciones al sector petrolero de Venezuela, entre ellas un veto a las importaciones de petróleo.
Más sanciones a Venezuela podría lastimar aún más su economía y situarla al borde de la bancarrota, dado que el sector petrolífero suministra el 95% de las divisas del país.