Puigdemont culpó del auge independentista en Cataluña a la ilegalización de parte del Estatuto de Autonomía catalán en 2010 por parte del Tribunal Constitucional.
Luego de que en semanas pasadas el Gobierno de España habilitará una serie de medidas para recuperar el control de Cataluña, el presidente destituido de la región, Carles Puigdemont, afirmó en una entrevista que todavía existe una solución pacífica al conflicto.
En una postura mucho más flexible a la que evidencio tras el referendo en Cataluña del 1 de octubre, en la que se votó a favor de la independencia, Puigdemont, sobre quien pesa una orden de arresto, aseguró al diario Le Soir que todavía existen soluciones que no necesariamente implicarían la Independencia en la región.
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“[Estoy] dispuesto a aceptar la realidad de otra relación con España. ¡Siempre es posible! Yo he trabajado durante treinta años para lograr otro encaje de Cataluña dentro de España”, aseguró el independista en una entrevista ofrecida al diario belga.
Puigdemont lleva ya dos semanas en Bélgica, país al que viajó para evitar ser arrestado por la justicia española, que lo acusa de los delitos de rebelión, sedición, malversación, prevaricación y desobediencia, entre otros cargos.
Desde el país mencionado, el expresidente catalán culpó del auge independentista en Cataluña a la ilegalización de parte del Estatuto de Autonomía catalán en 2010 por parte del Tribunal Constitucional.
“El origen de todo es la invalidación en 2010 del Estatuto de Autonomía que fue adoptado por los parlamentos catalán y español. ¿Sabe cuántos diputados independentistas había en ese momento en el parlamento catalán? 14 de 135. Ahora son 72. El responsable de la pujanza independentista es el Partido Popular””, aseguró el funcionario destituido.
Sin embargo, al ser cuestionado por el diario sobre si para él el tema se trata de “independencia o la muerte”, Puigdemont aseguró que “nunca” y señaló que sigue siendo posible llegar a un acuerdo con el gobierno central.
La situación legal de Puigdemont
El expresidente catalán estaba citado junto a otros trece miembros de su Gobierno a declarar ante la Audiencia Nacional por los delitos de rebelión el pasado 2 de noviembre. A dicha cita sólo acudieron nuevo de los miembros de su gabinete, mientras que él aprovechó para refugiarse en Bruselas con los restantes cuatro miembros de su gobierno.
La jueza instructora de la causa en la Audiencia Nacional dictó prisión incondicional para ocho de los antiguos miembros del Gobierno catalán, entre ellos el exvicepresidente Oriol Junqueras.
También fueron encarcelados dos líderes de las principales asociaciones civiles soberanistas —Jordi Sànchez, de la Asamblea Nacional Catalana y Jordi Cuixart, de Òmnium Cultural— el pasado 16 de octubre en el marco de la causa donde son investigados por delitos de rebelión.