En Estados Unidos está en juego la mayoría del Congreso y con esto la viabilidad del modelo de gobierno del actual presidente, pero ahora en la escena política Trump y Obama son los protagonistas rumbo a las elecciones de noviembre próximo.
Ciudad de México.- Donald Trump está en medio de una crisis de credibilidad e incluso, dentro de la propia Casa Blanca han surgido detractores por su forma de gobernar en una supuesta rebelión interna, pero también tiene otro frente de batalla que son las elecciones intermedias de noviembre próximo.
Y la importancia de esto es mayúscula, ya que está en juego la mayoría del Congreso que actualmente está en manos de los republicanos y esto le ha dado cierto margen de maniobra a Trump, pero en caso de que los demócratas recuperen el poder en las cámaras, pone en riesgo incluso su futuro político.
Dada la importancia, hasta el expresidente Barack Obama se ha convertido en el promotor de los demócratas y ha hecho el juego sucio de enfrentar con declaraciones y mensajes calientes a Donald Trump, quien ha respondido y ha tomado como bandera de batalla sus éxitos en materia económica.
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Trump está orgulloso del crecimiento económico
La lucha electoral se ha centrado en el desempeño económico que ha tenido Estados Unidos en este año, ya que Producto Interno Bruto (PIB) creció en el segundo trimestre a 4.2 por ciento, rompiendo la tasa anual del 4 por ciento por primera vez en cuatro años.
Y según el Fondo Monetario Internacional (FMI), Estados Unidos tendrá un crecimiento de 2.9 por ciento para todo 2018 y de 2.7 por ciento para 2019; además, en agosto se crearon 201 mil nuevos empleos, mientras que la tasa de desempleo se mantuvo en 3.9 por ciento.
Pero los detractores de Trump aseguran que estos números son el resultado de lo que hizo Barack Obama durante su gestión. Incluso el propio expresidente declaró en Illinois “que esas cifras de empleo son las mismas que en 2015 y 2016″.
Sin embargo, Kevin Hassett, principal economista de la Casa Blanca aseguró que la “mayor economía del mundo dio un salto en la era Trump” y juzgó lo dicho por Obama, ya que aseguró en declaraciones que retoma Expansión, que “la idea de que lo que estamos viendo ahora es solo una continuación de las tendencias no es muy defendible”.
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Los logros son compartidos
A pesar de que en esta disputa electoral Obama y Trump han entrado al juego de las descalificaciones y las críticas de sus rivales, lo cierto es que para muchos expertos que mantienen una postura más serena y neutral, afirman que el desempeño de la economía estadounidense se debe a los dos que ahora se disputan los créditos.
Douglas Holtz-Eakin, exdirector de la Oficina de Presupuesto del Congreso y asesor del excandidato presidencial republicano John McCain, aseguró: “no hay duda de que se debe a los dos”.
Mientras que Jared Bernstein, economista jefe del vicepresidente Joe Biden durante el gobierno de anterior, señaló que “Trump está en gran medida de pie sobre los hombros de Obama”.
Y agregó: “Trump está siguiendo las tendencias que heredó”, ya que “los datos muestran claramente que la expansión comenzó bajo el presidente Obama y si se dibuja una línea recta a través de gran parte de ella”.