Tras la reunión que sostuvieron Donald Trump y Xi Jinping, en el marco del G20 en Argentina, la guerra comercial entre Estados Unidos y China entra en una tensa calma y al menos por el momento, hay disposición de ambas partes para resolver los conflictos.
Ciudad de México.- Las disputas arancelarias entre las dos economías más poderosas del mundo ha creado un entorno de incertidumbre mundial y tras una larga serie de amenazas de Trump y respuestas similares del gobierno chino, ahora el diálogo comienza a dar frutos.
La primera señal de buena voluntad por parte del gobierno del presidente chino, Xi Jinping, es reducir y eventualmente eliminar los aranceles a las importaciones de autos estadounidenses, que actualmente tienen una tarifa de 40 por ciento.
Como respuesta, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, hizo una concesión para no aumentar los impuestos de 10 por ciento al 25 por ciento en contra de 200 mil millones de dólares en productos chinos.
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Las mesas de negociación
Con este acuerdo entre los mandatarios de Estados Unidos y China, comienza una especie de tregua que puede derivar no solo en la aplicación de más aranceles, sino que en la medida en que prosperen las negociaciones, tal vez hasta se pueda pensar en la eliminación de algunos que actualmente están funcionando.
De esta manera, Trump acordó con Xi Jinping que los “dos países hablarán sobre temas de tecnología y derechos de propiedad intelectual en un plazo de 90 días”, pero si en el lapso no hay ningún acuerdo, Estados Unidos elevará las tarifas de manera irremediable.
Por su parte, el viceministro de comercio de China, Wang Shouwen, reconoció que se ha llegado a ese acuerdo con los Estados Unidos e incluso, adelantó que ambos países también acordaron seguir “deliberando sobre el posible retiro de los aranceles del 25 por ciento que Estados Unidos ya impone a algunos productos de importación chinos”.
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Pocas esperanzas de acuerdos
Y si bien estas señales entre Trump y Xi Jinping han sido valoradas como positivas por los mercados financieros, algunos especialistas aseguran que la posibilidad de lograr acuerdos conjuntos todavía está muy lejana.
Así, la decisión de Donald Trump, “de suspender el aumento de los aranceles de aduana a productos de importación chinos dista de ser una solución completa de la fricción comercial entre las dos mayores economías del mundo”, dijo Notimex.
Mientras que el diario China Daily, aseguró que el nuevo “consenso” da un “respiro para resolver sus diferencias”, pero considera que no hay una “varita mágica que permita que las quejas desaparezcan de inmediato”.
En ese sentido, las diferencias han sido muy grandes entre ambos países desde que Trump llegó al poder y las acusaciones han sido muy fuertes por parte del gobierno estadounidense en contra de China, por lo que los pronósticos son reservados con respecto a estas nuevas negociaciones de orden comercial.
Por lo que “dada la complejidad de las interacciones entre las dos economías, el resto del mundo seguirá conteniendo el aliento de manera colectiva“, concluyó el China Daily en una de sus editoriales.