A la ceremonia acudieron figuras como el expresidente mexicano Carlos Salinas de Gortari, la Canciller de Alemania, Angela Merkel, el rey Abdalá II de Jordania, entre muchas otras.
A pesar de su avanzada edad, la noticia de su muerte cimbró a la comunidad política estadounidense. George H. W. Bush, patriarca de una de las familias más estrechamente vinculadas a la política norteamericana, falleció el viernes a los 94 años de edad.
El 42 presidente de Estados Unidos (1989-1993), fue despedido este viernes en la Catedral Nacional de Washington poco después de las 16:00 GMT. Antes, fue velado en el Congreso durante 36 horas y se declaró duelo nacional y un funeral de Estado en Washington en su memoria.
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Al funeral de Bush padre acudieron decenas de figuras de la política, presidentes y exmandatarios de todo el mundo. Fue un momento en el que los presentes olvidaron sus diferencias por unos minutos para homenajear al exmandatario estadounidense.
"El mejor padre que un hijo o hija puede tener": las emotivas palabras de George W. Bush a su padre fallecido pic.twitter.com/FlmfbOY5Br
— Univision Noticias (@UniNoticias) December 5, 2018
Por ejemplo, el polémico Donald Trump dio la mano al comienzo del funeral a Barack Obama con quien mantiene diferencias políticas e ideológicas desde hace varios años.
A la ceremonia acudieron figuras como el expresidente mexicano Carlos Salinas de Gortari, la Canciller de Alemania, Angela Merkel, el rey Abdalá II de Jordania y los expresidentes demócratas Barack Obama (2009-2017), Bill Clinton (1993-2001) y Jimmy Carter (1977-1981), que asistieron a la misa junto a sus respectivas esposas, Michelle, Hillary y Rosalynn.
Incluso el papa Francisco envió un telegrama de pésame por la muerte del expresidente, en el que ofreció sus oraciones a la familia Bush.
“Su Santidad invoca a todos los que lloran su muerte la bendición divina de fuerza y paz”, se lee en el texto.
Mientras tanto, el expresidente republicano George W. Bush, hijo del fallecido y quien fuera el presidente número 43 de EU (2001-2009), acompañó el traslado del féretro de su padre desde el Capitolio, donde hubo una capilla ardiente de más de 24 horas, hasta el templo en el que se celebra el funeral de Estado, en donde pronunció un discurso fúnebre.
Tras la ceremonia, el féretro del expresidente será trasladado a Texas de nuevo, para recibir este jueves un último adiós por parte de su familia.