Miguel Ángel Mancera declaró que no permitiría afectaciones a la ciudadanía en los proyectos para ocupar el espacio del aeropuerto actual y la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Ciudad de México (elsemanario.com).- El Jefe de Gobierno del DF inauguró el día de ayer el Foro Internacional Aeropuerto y Ciudad La Gran Transformación Urbana. En este evento, Miguel Ángel Mancera dejó claro que se escucharán las voces de arquitectos, urbanistas, académicos especialistas del país e internacionales, con el fin de poner las bases de lo que se hará con el espacio que ocupa el actual aeropuerto. Cabe aclarar, Mancera mencionó que la voz de la ciudadanía sería escuchada.
En lo referente a qué pasará con el espacio que dejará el actual aeropuerto y lo que se construirá en su lugar, Mancera abordó que
lo que menos se buscaría con este proyecto es que haya exclusión social. Debemos de incluir a esta población en un foco de desarrollo que les dé una mejor perspectiva de vida”.
De manera especial hizo énfasis en las condiciones poco favorables en las que se encuentran los vecinos del puerto aéreo en la zona oriente de la ciudad, comparándolas con las de otros países que viven cerca de los aeropuertos y los beneficios que obtienen por sus lugares de residencia. Para Mancera, las personas que viven cerca de este lugar son de vital importancia por su cercanía con los aviones, la contaminación y el riesgo por la llegada de las aeronaves.
Pero el discurso del mandatario no sólo se quedó ahí; el dirigente capitalino abordaría que hay más de dos mil 500 de negocios y empresas relacionados con el Aeropuerto; eso se traduce, según las palabras de Mancera, en 131 mil empleos, todos ellos asentados en el territorio mencionado. Además de aproximadamente cuatro mil 500 millones de dólares que implica la derrama económica del lugar. Entre todo lo que se ha de analizar para que las cosas salgan bien:
Mi obligación, la obligación del gobierno por supuesto es que consiste en defender a la ciudad, por más que tuviera un proyecto el Gobierno Federal que fuera de urgente necesidad o de gran proyección, si la Ciudad de México estuviera afectada no podríamos permitirlo, no lo podríamos aceptar”.
Sin embargo, justamente por la cabeza de muchos habrá pasado lo que también, a lo mejor, pasó por la cabeza del mandatario: si se está hablando de no afectar a los ciudadanos, ¿qué pasa entonces con los que se verán afectados por la construcción del nuevo aeropuerto?
Y si es necesario que lo consultemos, ¿por qué no?, ¿qué opina la Ciudad de México de tener un nuevo aeropuerto?, ¿qué opina de esta necesidad?, ¿qué opina de que pueda tener tales o cuales beneficios o qué opina de que no se haga? También yo creo que podemos escuchar la opinión de no solamente de los que vamos a participar acá sino de los demás involucrados”.
Diría Miguel Ángel Mancera casi al concluir el discurso con el que se inauguró el foro mencionado
Este es un inicio de lo que va a ser una gran construcción de opinión respecto a este proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México”.
¿A qué se debe esta repentina vuelta de tuerca en el tema del aeropuerto?
Miguel Ángel Mancera declara que hay que consultar a la ciudadanía. Valdría destacar o preguntar a cuál. Ese concepto es bastante amplio y tiene lagunas inmensas en lo social, lo político y lo jurídico. ¿Van a consultar a los verdaderos afectados o a un sector específico, de, en efecto, la ciudadanía? Habrá que esperar. De ser totalmente transparentes y de representar los intereses de los afectados, ¿cómo se defendería el resultado de una encuesta o consulta frente un proyecto aprobado y que representa tanto para la actual administración? Al respecto, Mancera diría que
Lo vamos a llevar, si es necesario con el Presidente de la República, pues con él también lo platicaré (…) Personalmente me voy a encargar de este tema. Nada más vamos a esperar conclusiones, vamos a oír a expertos; va a participar mucha gente por acá”.
El pasado 13 de septiembre inició oficialmente la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM). Destaca que este megaproyecto no tendrá recortes presupuestales, con lo que el Director Corporativo de Infraestructura del Grupo Aeroportuario, Raúl González Apaolaza, aclara que parte de los recursos para esta obra son de orden fiscal y la otra es bancaria, por lo que si en algún momento se llegara a aplicar algún recorte optarían por acercarse a los fondos de los bancos a través de bonos:
Creemos que no nos afecta; creemos que tenemos los recursos suficientes para mantener una ruta crítica que nos lleve a que la inauguración del aeropuerto sea el 20 de octubre de 2020”.