Las personas que sufren del mal de Alzheimer podrían mejorar su memoria y habilidades cognitivas al tomar probióticos, según investigadores.
Un estudio en el Frontiers in Aging Neuroscience, encontró que una dosis diario de lactobacilos y bifidobacterias tomada por más de 12 semanas es suficiente para obtener mejoras moderadas en las pruebas mentales de varios pacientes.
Pacientes tomaron leche con probióticos
Según Telegraph, la prueba involucró a 60 pacientes, quienes tomaron la bacteria por 12 semanas. Ellos fueron divididos en dos grupos de 30 pacientes: un grupo tomó leche normal, y el segundo grupo leche con probióticos (200 ml al día).
El segundo grupo mostró mejores resultados en las pruebas de habilidad mental en comparación a los que no tomaron los suplementos, y de hecho vieron sus resultados caer. Se les midió su función cognitiva antes y después de las 12 semanas de la investigación usando un examen MMSE. Dicho examen consiste en un cuestionario de 30 puntos que se usa para detectar fallas cognitivas.
El estudio fue llevado a cabo por investigadores de Universidad de Ciencias Médicas de Kashan, en Irán. La investigación buscaba descubrir si los suplementos probióticos pueden ayudar a mejorar las funciones cognitivas de los pacientes que sufren de Alzheimer.
Grupo que tomó probióticos mostró mejoras cognitivas
En general, los pacientes que tomaron probióticos mostraron una mejoría en el examen del 27,9%, mientras que quienes no los tomaron mostraron una baja del -5,03%, informa NHS.
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De acuerdo a Webmd, también se investigaron los efectos de los probióticos en el metabolismo e inflamación del cuerpo.
¿En dónde se encuentran los probióticos?
Los probióticos son encontrados en comidas o bebidas fermentadas, como el yogurt. También se pueden encontrar en productos de soya fermentados, el chucrut y el kéfir. También se pueden encontrar en varios productos que contienen estas bacterias como tabletas y bebidas.
Esta bacteria “amistosa” ayuda al balance de los niveles de microorganismos que se encuentran en los intestinos y bajan los niveles de la bacteria “mala”.
Se ha descubierto que los probióticos pueden proteger contra diarrea, alergias, e inflamación en los intestinos. Ahora parece que pueden ayudar a la función cognitiva y pronto se iniciarán pruebas para ver si pueden ayudar a reducir ansiedad y depresión.