Investigadores estadounidenses lograron evitar que la denominada “hormona del hambre” produzca ghrelina sustancia que genera una atracción irrefrenable por la comida, y que se identifica como la causante del efecto rebote.
Minnesota, Estados Unidos .- A través de un articulo publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, investigadores de la Mayo Clinic de Rochester señalaron que lograron detener la producción de ghrelina, una sustancia que a sido identificada como la causante del efecto rebote, el cual se da poco después de haber realizado una dieta, y cuya característica principal es una atracción irrefrenable por la comida.
De acuerdo con Salud 180, la investigación la realizó Stephen Brimijoin, neurobiólogo, quien desarrolló la inyección mediante la cual la enzima butirilcolinesterasa, que produce el hígado humano naturalmente, y la aplicó a roedores que habían sido obesos una sola aplicación bastó para que los ratones no subieran de peso.
Añadieron que las investigaciones continúan y los científicos aseguran que podría ser un gran avance para las funciones metabólicas y su comportamiento. “Además si se logra por medio de ella controlar la obesidad, podrían evitarse afectaciones como la hipertensión arterial y afecciones cardiacas”, señaló el experto.
Por su parte la Doctora Mónica Katz, quien participa en el estudio, explicó que; “al tener la sensación de hambre, comes más; pero además, la ghrelina hace que gastes menos calorías e impide que degrades grasas. Cuando alguien hace una dieta que implica consumir menos calorías de las que debería, hay mucha ghrelina. Eso hace que comas y provoca el llamado ‘efecto rebote'”.