Ante el crecimiento del número de amputaciones a causa de diabetes, investigadores del IPN trabajan en desarrollar prótesis mas avanzadas para devolver la calidad de vida a estos pacientes.
Ciudad de México (elsemanario.com).- Todo comienza con una pequeña grieta en el pie, posteriormente se forma una úlcera, que crece con el paso de los días y termina infectándose con microorganismos difíciles de controlar; esta es la historia de muchos que sufren diabetes.
El paciente con diabetes presenta dificultad en la capacidad que tiene su organismo para defenderse de infecciones e incluso se retrasa la cicatrización debido a la hiperglucemia, propia de su condición.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que el total de amputaciones de extremidades está relacionado entre un 40 y un 85 por ciento con la diabetes. En México, de acuerdo con las cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 70 por ciento de estas amputaciones pudieron haber sido prevenidas con una atención médica temprana a esas lesiones, que muchos de los pacientes consideran ‘insignificantes’ debido a que la enfermedad daña muchas veces las vías nerviosas que transmiten el dolor y por lo tanto no suelen percatarse de la severidad de su herida.
Las cifras indican que solo uno de cada diez personas con miembros amputados se rehabilita y únicamente el 30 por ciento de estos sabe usar adecuadamente sus prótesis y aparatos. Una de las principales causas para la falta de rehabilitación tiene relación directa con el costo de las prótesis, que pueden llegar a costar hasta 110 mil pesos; aunado a esto existen los problemas de comodidad y funcionamiento eficiente que presentan algunas de las prótesis.
Tras la creciente demanda y considerando que el número de pacientes con diabetes para el 2030 se estima en 340 millones de afectados en el mundo, alumnos del Instituto Politécnico Nacional trabajan ya en un modelo de prótesis que resulta altamente funcional, debido a sus características en diseño innovador.
Esta prótesis se destaca por el grado de confort que maneja y su funcionalidad basada en el diseño de elementos semiactivos de amortiguamiento, especialmente en el tobillo, los cuales controlan el caminar de una persona. Creada como parte de su proyecto de tesis por el alumno de maestría en Tecnología Avanzada, Hugo Luis Serrano Molina, la prótesis tiene como finalidad reequilibrar el pie y compensar de manera funcional el segmento amputado, además busca hacer que los pacientes vuelvan a caminar de manera confortable y que su reinserción social y laboral sea posible.
Actualmente la prótesis promedio solo usa resortes o carece de algún tipo de amortiguamiento, lo cual genera que las personas con un miembro amputado sientan el golpe directo que se transmite por el impacto de la presión al caminar. Aun cuando las personas llegan a adaptar sus prótesis con vendas o cojines especiales, la piel de esta herida es altamente sensible y sufre estiramientos a causa de la fricción, ocasionando lesiones significativas.
El alumno de UPIITA (unidad profesional interdisciplinaria en ingeniería y tecnologías avanzadas) intentó sustituir lo mejor posible parte del funcionamiento natural involucrado en la fase de marcha, gracias al amortiguador magnetoreológico que construyo, ha logrado otorgarle a la prótesis la rigidez y el amortiguamiento que se pierde a cuando se amputa alguna extremidad baja.
El sistema posee cinco entradas, dos de ellas son señales de electromiografía, una se coloca en el musculo tibial anterior, que ayuda a realizar los movimientos de flexión dorsal, mientras que la otra se coloca en el músculo gastrocnemio, encargado de la flexión plantar; estos dos movimientos son los que se utilizan principalmente para caminar.
La planta del pie de la prótesis se diseñó en dos partes para darle la movilidad requerida y justo a la mitad de la misma está la unión entre el talón y el pie, sitio en el que se colocó un sensor de fuerza que ayuda a detectar los impactos del talón.
El prototipo de la prótesis fue diseñada con aluminio y plástico ABS, que es un policarbonato utilizado para impresiones en tercera dimensión, su peso es de aproximadamente dos kilos, esto es, similar al peso natural de la articulación de tobillo y una parte de la pantorrilla.
Actualmente su creador trabaja para lograr hacer que esta prótesis tenga una batería incorporada con la finalidad de que el motor active los mecanismos de manera automática, también se busca cambiar el diseño a fibra de carbono y titanio, para reducir el tamaño del dispositivo como mayor comodidad del usuario.
En algunos años cuando esta prótesis sea lanzada al mercado, comenzará una nueva era de tecnología aplicada y se lograrán hacer cambios significativos en cuanto a la calidad de vida de un sector de personas que se incrementa cada día sin que esto signifique un gran desajuste en sus bolsillos.
Quiero saber dónde puedo adquirir una prótesis de pierna. les agradecería si me pueden dar la dirección gracias.