Las casas han resultado los sitios de mayor peligrosidad para las mujeres con 44 feminicidios, doce en zonas desoladas, doce en la vía pública y tres en centros de trabajo.
Managua.- Nicaragua apuntó 72 feminicidios y 58 intentos frustrados en 2013 y las regiones del Caribe, las más empobrecidas del país, registraron los más altos índices de violencia y víctimas mortales, de acuerdo con cifras de un organismo no gubernamental.
Conforme los registros de Católicas de Nicaragua, en 2013, el país registró 65 asesinatos, una cifra elevada comparada con cinco en Costa Rica, uno en Honduras y uno en Guatemala.
En 2012 contabilizaron 76 homicidios, incluidos cuatro en el exterior, según los datos estadísticos divulgados hoy en Managua.
El organismo señaló que el grupo más afectado por la violencia se registra entre personas con edades entre los 21 y mas de 40 años de edad al registrarse 55 muertes.
Entre los agresores, destacaron que 25 fueron identificados como sus parejas, cindo como ex compañeros de vida, trece como no identificados , catorce como otros conocidos de la víctima e incluso dos hijos y un yerno, de acuerdo a las estadísticas.
Las casas han resultado los sitios de mayor peligrosidad para las mujeres con 44 feminicidios, doce en zonas desoladas, doce en la vía pública y tres en centros de trabajo.
Un total de 31 mujeres murió por arma de fuego, nueve por heridas causadas con machete, seis por golpes y cuatro fueron estranguladas luego de ser violadas.
La región sur del Caribe contabilizó 16 asesinatos de mujeres, diez en el norte del Caribe, doce en Managua (capital), cinco en León (noroeste) y cinco en Matagalpa (norte) y el resto con menor incidencia.
El patrón dijo, se repite en los feminicidios en grado de frustración y entre las armas más utilizadas figuran las de fuego y el machete.
Uno de los casos fue la muerte de una mujer arrollada por el vehículo de su esposo.
Católicas de Nicaragua alertó sobre la situación de 25 agresores que están prófugos de la justicia y exigió el fin de la impunidad.
Cabe señalar que la ley para impedir la violencia contra las mujeres sanciona con 30 años de cárcel a los agresores, pero una reforma aprobada el año pasado permite la mediación entre la víctima y su victimario en caso de delitos “menos graves”.
Las organizaciones feministas han lanzado críticas a la mediación debido a la desventaja de las mujeres y la posibilidad de nuevas agresiones que puedan causar la muerte de la denunciante.
Con información de Notimex.