Un grupo de expertos economistas consultado por Reuters, indicó que en el marco de la tercera ronda de negociaciones sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), las economías de México y Canadá no sufrirán afectaciones.
México – Economistas aseguran que las preocupaciones sobre los daños causados por la renegociación podrían ser exageradas y que el resultado más probable sea que las conversaciones lleven a un acuerdo trilateral actualizado después de muchos meses o años.
“Cualquier cambio probablemente será gradual”, dijo Brett Ryan, economista de Deutsche Bank en Nueva York. “Las corporaciones estadounidenses, particularmente los fabricantes de automóviles, estarían en riesgo sustancial de interrupciones en la cadena de suministros. El ‘lobby’ de los agricultores estadounidenses también se opondría”.
De los 38 bancos e instituciones encuestados, una tercera parte respondió que los cambios que sufrirá el actual TLCAN, serán graduales y que afectarían a México y Canadá de manera neutral o positivamente.
“Es probable que los cambios abarquen mecanismos de solución de disputas, estándares laborales y ambientales, protecciones a la gestión de suministros y normas de origen, entre otras áreas, y podrían tener el mayor impacto en las industrias automotriz y agrícola”, citó el portal América economía.
Aclaró que, la perspectiva de un cambio radical hacia el proteccionismo parece improbable, especialmente después de que una serie de escándalos y el vacilante apoyo de la clase dirigente política han obligado a Trump a retroceder repetidamente en sus promesas de campaña.
“Un final del TLCAN plantearía obstáculos para el Gobierno de Estados Unidos, ciertamente para el presidente de Estados Unidos, y también conduciría a duras quejas del sector privado”, dijo Jesús López, economista del Banco Base en Ciudad de México.
La respuesta más común entre los economistas que siguen la economía canadiense fue que las conversaciones tendrían un impacto económico neutral. En el caso de México, la respuesta más usual apuntó a una reacción positiva, que extendería una tendencia alcista vista en la primera mitad de 2017.