Luego del escándalo de los motores trucados, Volkswagen planea acelerar su oferta de vehículos a su catálogo, con ello, lucha recuperar su imagen ¿lo logrará?
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Buscando posicionarse como líder de los transportes ecológicos tras haberse visto involucrado en el escándalo de los motores diésel trucados, Volkswagen anunció el lanzamiento de más de 30 modelos de coches eléctricos en los próximos diez años. Su meta, vender de dos a tres millones de estos modelos por año.
Así, la alemana pretende “transformar su actividad principal en el sector automovilístico o, por decirlo de otro modo, hacer un realineamiento fundamental para prepararse a una nueva era de la movilidad”, declaró el presidente ejecutivo de la firma, Matthias Müller.
Volkswagen se centrará en “los segmentos más atractivos y de más rápido crecimiento del mercado”, agregó.
Volkswagen a la línea
Müller sostuvo que la empresa necesita más vehículos eléctricos para poder cumplir con las estrictas normas sobre emisiones de dióxido de carbono, el gas que de acuerdo con los científicos es uno de los principales causantes del calentamiento global, sin embargo, no dejará de fabricar motores de combustión interna.
La estrategia fallida
Volkswagen se concentró en fabricar máquinas diésel a fin de adherirse a las normas anticontaminación, pero esa estrategia sufrió un enorme revés cuando se descubrió que la compañía había manipulado sus vehículos con un software que encendía los controles de emisiones durante las pruebas, pero los apagaba con la actividad cotidiana.
Actualmente, la compañía está negociando un acuerdo con las autoridades estadounidenses en el tribunal federal de San Francisco, a gin de reparar o reemplazar unos 500 mil vehículos que contienen el software problemático. Unos once millones de vehículos fueron vendidos en todo el mundo con ese programa.
En Bélgica, la alemana está a punto de enfrentarse a una demanda colectiva.
Volkswagen ha reservado por lo menos 16 mil 200 millones de euros provenientes de sus ganancias de año pasado para financiar las reparaciones y las devoluciones de vehículos.
Por su parte, Müller afirmó que no hay razón alguna para aumentar esa cifra con base a la información obtenida hasta ahora.