Cautivar a las personas desde el primer instante es algo que forma parte del éxito, pero el secreto de la primera impresión radica en la sonrisa, la postura y la mirada.
Ciudad de México.- Hay personas que cautivan con tan sólo su presencia, son capaces de dominar el ambiente y crear una excelente imagen de ellos mismos en aquellas que incluso no las conocen, pero el secreto de la primera impresión radica en la sonrisa, la postura y la mirada.
El lenguaje corporal es algo a lo que no le prestamos mucha atención, sin embargo, dice más de nosotros mismos que lo que uno desearía y puede ser más poderoso que las palabras.
Por eso, el secreto de la primera impresión radica en la sonrisa, la postura y la mirada, que son lo primero que nos llega como información sobre la otra persona.
Para nadie es un secreto que una sonrisa cautivadora causa un efecto hipnotizador, nos provoca sentimientos agradables y hasta somos contagiados de su frescura y alegría.
Por eso sonreír de manera natural, es una de las mayores manifestaciones de satisfacción con uno mismo, con el momento y con el entorno, lo que genera una percepción positiva en las demás personas.
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La otra parte complementaria a la sonrisa es la mirada. Sucede exactamente lo mismo cuando una mirada es atractiva y cautivadora y mantener contacto visual con los interlocutores manda el mensaje de seguridad, confianza e interés por lo que dice.
“Aunque algunas personas inseguras piensen que esto es algo intrusivo, en general funciona para despertar sentimientos de respeto, afecto y hasta para dar la impresión de ser un pensador abstracto e inteligente”, señala el portal Entrepreneur.
Pero hay que tener cuidado, porque muchas veces las personas confunden el mantener contacto visual de forma natural, con una técnica más intimidatoria que se convierte en algo negativo y es completamente disfuncional para el hecho de causar una buena impresión.
Y finalmente está la postura corporal, en donde una correcta alienación de cuerpo provoca que las personas transmitan a los demás seguridad y mucha fortaleza emocional.
“Cuando te paras con confianza con tus hombros hacia atrás y tu cabeza arriba con una sonrisa cálida te ves como alguien refinado, exitoso y orgulloso”, señala el portal.
Esto de inmediato cautiva y provoca un efecto positivo en los demás, por eso decimos que el secreto de la primera impresión radica en la sonrisa, la postura y la mirada, ya que con estos tres elementos muchas personas consiguen cosas muy interesantes, tanto en el ámbito profesional o de negocios, como en el plano personal.
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