A pesar del deseo de todas las personas de mantener una ruta ascendente en sus proyectos, el éxito y el fracaso son parte de la vida de todo emprendedor.
Ciudad de México.- Si buscas comenzar un proyecto de negocio, debes saber de antemano que el éxito y el fracaso son parte de la vida de todo emprendedor, ya que esta dualidad es una de las fórmulas más productivas si se sabe aprovechar.
La idea generalizada es que equivocarse es dañino, pero la realidad es que es la manera más efectiva para aprender, ya que como dice el sabio refrán, “nadie experimenta en cabeza ajena”.
Así, el éxito y el fracaso son parte de la vida de todo emprendedor y el primero es un riesgo calculado que se debe asumir y que si bien puede ser uno de los golpes más duros, también es la base que sostiene la escalera que lleva a los objetivos deseados.
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“El éxito nunca será la ausencia del fracaso, pero tampoco un fracaso sepulta la posibilidad de tener éxito”, dice el sitio Entrepreneur.
De esta forma, el éxito y el fracaso son parte de la vida de todo emprendedor y también una oportunidad para construir un desarrollo personal a la par de los proyectos empresariales, ya que para aprender de los errores, es necesario dominar altos niveles de tolerancia a la frustración, así como mantenerse motivados y seguros de sí mismos.
Evidentemente el objetivo es equivocarse lo menos posible, pero para lograr esto, se necesita aprender de los errores y la única manera de identificarlos y asumirlos como tal, es precisamente con resultados negativos que evidencien las fallas que se cometen, con lo cual se puede crear un círculo virtuoso para las personas en todos los sentidos.
Con esto, se desarrollan habilidades emocionales que serán la clave para soportar los malos momentos, aprender, mejorar y seguir caminando de manera firme y con un objetivo preciso en el ámbito emprendedor.