A pesar de que en los años recientes la llegada de vehículos procedentes de la frontera norte ha disminuido, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) asegura que ahora comienzan a llegar de manera ilegal unidades que no cumplen con las medidas de seguridad ni las reglamentaciones de ley, por lo que consideran que los autos usados importados de Estados Unidos puede afectar la industria nacional.
Ciudad de México.- Los llamados “autos chocolates” ya no tienen ni la misma presencia ni el mismo valor comercial en el mercado nacional, su importación ha ido descendiendo de manera constante y esto ha equilibrado los números con respecto a la comercialización de los vehículos nacionales, sin embargo, hay señales de alerta que las autoridades deben atender.
De acuerdo a Guillermo Rosales Zárate, director general adjunto de la AMDA, ahora hay una nueva modalidad que comienza a crecer y que utilizan los importadores para traer a nuestro país unidades que no cumplen con las leyes ni con las reglamentaciones para poder ingresar de forma legal a territorio nacional.
Según sus declaraciones que retoma Notimex, “los importadores encontraron una nueva forma de burlar los controles, al lograr que las unidades catalogadas en Estados Unidos como pérdida total sean consideradas Salvage y así poder introducirlas al país”.
Una situación que consideró Rosales, “se vuelve un factor de riesgo importante que no podemos desatender, tanto para la población como para la industria”.
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Importaciones de autos usados de Estados Unidos
Las regulaciones que actualmente están vigentes datan de finales de 2011, cuando las autoridades mexicanas aprobaron los marcos jurídicos para poder hacer importaciones de autos usados procedentes de Estados Unidos y contar con un registro de estas unidades.
En 2017, cifras de la AMDA señalan que ingresaron al país procedente de la frontera norte 110 mil unidades, lo que equivalió al 8.2 por ciento del total de automotores comercializados ese año en nuestro país.
Sin embargo, para enero de este año la importación de autos usados fue de 11 mil 346 unidades, equivalente al 10.4 por ciento del total de ventas de vehículos nuevos y un aumentó de 17.4 por ciento respecto a similar periodo de 2017.
Lo que significa que estos aumentos se relacionan con el hecho de “que los importadores y casas de subasta de Estados Unidos encontraron la forma de importar vehículos restringidos”, aseguró Guillermo Rosales Zárate.
Ante lo cual, el directivo aseguró: “estamos observando cómo empieza a marcar un cambio de tendencia y si no se toman cartas en el asunto por parte del Servicio de Administración Tributaria (SAT), esto evidentemente puede transformarse en una notable afectación a la industria nacional”.