La industria automotriz ha sufrido bajas en las ventas de vehículos armados y producidos en México, problema generado, en gran parte, por las negociaciones del TLCAN y la guerra comercial actual.
México .- Tras ocho meses de bajas consecutivas y números negativos, según el último reporte de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y en comparación con agosto de 2017, se registró una caída de 5.3 por ciento en la venta de autos nuevos.
De acuerdo con la AMIA, de enero de 2018 a agosto de 2018, la variación ha sido de 7.8 por ciento menos. Es decir, en ese periodo de tiempo en 2017 se vendieron un total de 990 mil 492 autos nuevos, mientras que en el año en curso sólo han salido de las agencias 913 mil 726 unidades.
En tanto en el sector premium, que se ha mantenido al margen con buenas ganancias, destaca aumentos la marca BMW con el 19.7 por ciento en el periodo antes mencionado (enero – agosto de 2017 vs. enero – agosto de 2018), Infiniti creció 10.8 por ciento, Jaguar 88.8 por ciento, Land Rover 184.2 por ciento y Lincoln con 33 por ciento. Del lado de las marcas que no pertenecen al segmento premium, los aumentos se concentraron en Hyundai con el 18.1 por ciento, KIA con 9.5 por ciento, Mazda con 6.3 por ciento, Peugeot con el 9.9 por ciento, Toyota con dos por ciento y Suzuki con un sorprendente 42.8 por ciento.
Por su parte, en el sector de exportaciones automotrices, estas sí han logrado un crecimiento significativo, pues en el periodo de referencia se logró un crecimiento de 15.4 por ciento.
En total se han producido 369 mil 543 autos en nuestro país, de los cuales 281 mil 805, han dejado el territorio nacional. Aún con la tensión de la negociación del Tratado de Libre comercio de América del Norte, Estados Unidos ocupó el primer lugar como destino de las exportaciones.
De acuerdo con el portal Motor Pasión, las causas que han generado los números negativos del sector, se encuentra el alza en los precios de los vehículos, pero aun con bajos salarios lo que disminuye el poder adquisitivo de las personas.
Además de un encarecimiento de otros productos para la vida diaria que aún con las promociones o planes de financiamiento cada vez más accesibles, aunque arriesgados, no es suficiente para hacerse de un auto nuevo.
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