Mediante el uso de infusiones a base de frambuesa científicos de la Universidad Autónoma del Estado de Hidaglo, informaron que lograron mitigar el síndrome de abstinencia a la nicotina.
Santiago Filardo Kertstupp, profesor investigador del Área Académica de Química en Alimentos de la Universidad, detalló, a Notimex, que durante la investigación utilizaron ratones que expusieron a la nicotina durante siete días, con el fin de hacerlos adictos a la sustancia; después de este tiempo, se les suspendió la dosis para crearles el síndrome de abstinencia a esta droga.
“Cuando esto sucedió comenzamos a darles el tratamiento y comprobamos que en el modelo animal podíamos controlar el síndrome de abstinencia”, señaló Kertstupp.
Por su parte Alfonso Atitlán Gil, quien fue el encargado de los tests de validación biológica contra el tabaquismo, comentó a la Agencia Informativa del Conacyt, que los resultados obtenidos en las pruebas con humanos a través de fases pre y postratamiento arrojaron datos que muestran que algunos sujetos pudieron dejar de fumar en su totalidad y otros disminuyeron considerablemente el número de cigarros al día.
“Esto se debe a que la frambuesa tiene un componente activo, llamado ácido elágico y está relacionado con una mayor rapidez en la eliminación de la nicotina, convirtiéndola en cotinina sérica, ayudando a desintoxicar al individuo no solo de la nicotina en sí, sino de otras sustancias tóxicas que se encuentran presentes en el humo del tabaco”, agregó Atitlán Gil.
Los investigadores sugieren que el tratamiento se lleve por catorce días, en los cuales se debe consumir cinco gramos diarios del polvo de frambuesa.
Las dosis es empaqueta en sobres con la intención de que pueda ser diluido o espolvoreado en otros alimentos, con la instrucción de que se utilice a la misma hora diariamente durante los catorce días.
“Cualquier adicción tiene un componente emocional y psicológico muy importante, por lo que previo al tratamiento, pedimos que el paciente se atienda con un especialista que debe ayudarlo psicológicamente en el proceso de abandono del tabaco”, finalizó el doctor Alfonso Atitlán.