En la mayoría de las ocasiones, cuando recibimos un paquete, mueble o souvenir, es común que venga envuelto delicadamente con un plástico que tiene burbujas, donde nuestra primera idea es comenzar a reventarlas, pero te has preguntado ¿por qué es tan placentero hacerlo?
Ciudad de México .- Las respuesta de porqué se vuelve adicción jugar con el plástico de burbujas es por la inmediatez de placer y, como cualquier cosa que al ser humano le causa tal sensación, busca repetirse.
Según expertos, al explotar cada burbuja, se produce una satisfacción rápida, la cual es acortada entre la acción y reacción del hecho, por lo que el cerebro obtiene esa sensación de recompensa inmediata a un estímulo.
De acuerdo con el portar El Comercio, la sensación se explica de la siguiente manera: al explotar la primera burbuja, el cerebro recibió un estímulo de satisfacción, por lo que este mismo buscará sentirlo de nuevo y si contamos que el plástico posee miles de burbujas pues buscaremos varias veces ese placer y satisfacción constante.
“En este proceso adictivo también interviene el nivel de dificultad. La energía, el tiempo y la fuerza que la persona utiliza para hacer explotar la burbuja es mínima, permitiendo que uno pueda seguir con la acción por un buen tiempo”, acota el medio.
Además, y como dato curioso, en ciertos países se celebra el día de las burbujas de plástico. Ahora, ya podrán vivir en paz, conociendo el gran misterio que estaba detrás de las bolitas de plástico, las cuales generan satisfacción después de ser tronadas.