Elecciones en el Estado de México, comunicación baladí

Mientras unos discuten si la comunicación es ciencia o no, vamos a aceptar que hoy por hoy es una actividad vital del ser humano y de las instituciones que requiere ser tratada con profesionalismo y respeto, sobre todo, si se esperan de ella resultados. En el pasado proceso electoral del 4 de junio, en el Estado de México, se maltrataron en varios momentos los procesos de comunicación y los mensajes.

Para que la ecuación de la comunicación pueda dar grandes resultados y, sin duda, sabe darlos, hay que cuidar y saber combinar siempre cinco variables: conocimiento de las audiencias, definición de los mensajes, preparación de los voceros, uso adecuado de los medios y asertividad en el uso de los tiempos. Hubo sin duda errores en los procesos, la victoria se la llevó –no es coincidencia‒ quien trató con profundidad y profesionalismo sus procesos de comunicación.

Todos los que medianamente para arriba entendemos de procesos electorales, sabíamos que para el 3 de junio las posibilidades de triunfo de @alfredodelmazo eran grandes, sabíamos de la caída estrepitosa de @JosefinaVM, del remonte importante de @JuanZepeda_, y también sabíamos que si mucha gente salía a votar podría entonces ganar @delfinagomezmeza.

Un principio de la comunicación moderna es que nada debe suceder que no está previamente planeado y definido, bajo esa premisa analice usted por qué en su último tuit antes del 4 de junio @alfredodelmazo con sólo 164 mil seguidores dijo, “estamos listos para gobernar”, mientras que @delfinagomezmeza con sólo 33 mil seguidores decía: “salgamos a votar”, y @JuanZepeda_ con 24 mil seguidores decía “gobernaré para todos”, mientras que @JosefinaVM con más de 1 millón de seguidores escribía: “ya ganamos”. Vale la pena el análisis, ¿no lo cree?

Pero más interesante puede ser que califiqué el mensaje en twitter del día 4 de junio:

@alfredodelmazo: “¡gracias!”;

@delfinagomezmeza: “ganamos la elección”;

@JuanZepeda_: “se fortaleció el PRD, fuimos la mejor campaña” y,

@JosefinaVM: “ya voté…, las tendencias no me favorecen…, fue una elección de estado…, no me voy…”.

El siguiente tuit, después del día 4 fue éste (¿usted qué opina?):

@alfredodelmezo, día 5 de junio: “¡ganamos!”;

@delfinagomezmeza, día 5: (silencio), día 6: “exigimos recuento”;

@JuanZepeda_, día 5: “el mejor resultado de la historia para el PRD”;

@JosefinaVM: (no dijo nada).

Requiere análisis el mensaje de Ricardo Anaya el día 5 a primera hora de la mañana: “ganamos al menos 3 de 4”, cuando acababa de perder la más importante de las elecciones. Pero así es Ricardo, y si no me lo cree vea su página de Wikipedia donde al hablar del primer proceso electoral en el que participó, en vez de decir que no perdió, vea usted lo que dice:

En el año 2000, a los 21 años, fue candidato del PAN a Diputado local por el XIV Distrito de Querétaro, que comprendía los municipios de Arroyo Seco y Pinal de Amoles, logrando para su partido un incremento en la votación de más del 400% respecto de la anterior elección.

Algo que igualmente nos sorprendió, desde una óptica de comunicación, fue la confusión de roles de los voceros. A veces en el caso de MORENA, no sabíamos si el vocero de Delfina era AMLO o AMLO el superior de la maestra; ya en la campaña fue abrumadora la presencia del tabasqueño y ahora es más en la defensa. Este tipo de invasión de roles también confunden.

En términos de comunicación todo es estrategia, a veces el silencio es más importante que el alboroto, el mensaje de propuesta más importante que el de queja o reproche, el desaparecer más importante que el estar presente, la espontaneidad más eficaz que la rigidez y, finalmente, tener siempre más definido lo que no se va a decir que lo que se debe decir.

Dos reglas de oro que se rompieron también en la campaña e inevitablemente pasaron factura porque así ha sido siempre en la historia de los políticos en el mundo: no hablar mal de la prensa y no pelearse con un colega comunicador.

Finalmente, un tip sobre su comunicación a los perdedores:

Josefina: cuando Kaliman repetía que “la mejor defensa es el ataque”, no estaba pensando necesariamente en una campaña política;

Delfina: dicen los que saben que siempre debe haber un vocero porque el vocero es el mensaje.

Juan Zepeda: nunca perdió porque nunca pensó que ganaría y obtuvo, como él mismo dijo, la mejor votación de la historia para el PRD. Felicidades Juan por tu campaña.

0 0 voto
Calificación del artículo
Subscribir
Notificar a
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
0
Danos tu opinión.x
()
x