Lección emeritense

A la convocatoria de Carlos Flores y Heriberto Murrieta, el domingo 25 de febrero de 2018 en la cabina de Radio Fórmula, nos reunimos para en un programa especial, además de los dos conductores, Alejandro Silveti, Eduardo Castillo, Rafael Cué, Marysol Fragoso y el que escribe; fue la sexta edición de “Los medios unidos por la Fiesta Brava”, transmitiéndose en vivo en ABC y Radio Fórmula.

Los temas fueron: “¿Qué necesita la Fiesta para recobrar su popularidad?”, “La madurez por la que atraviesan los matadores mexicanos en la actualidad”, “¿Hay crisis en la ganadería mexicana por falta de bravura?”.

Por el tiempo efectivo de 45 minutos, sabrán que es imposible externar a fondo lo que cada uno piensa en cada tema y, por lo tanto, pretender llegar a conclusiones sería prácticamente imposible. Preferiría mejor que cada uno reflexione sobre los mismos y, de ser posible, me los hagan llegar a mi cuenta de @Carazo_TDN para recoger su pensamiento y entonces encapsularlo.

Es importante que los que son aficionados y no tienen un micrófono manifiesten lo que piensan, para no interpretar por ellos lo que los temas les provocan y meditar luego lo que opinan quienes representan a los consumidores del espectáculo taurino.

Queremos todos, desde luego, que la fiesta vuelva a la televisión abierta en todos los países taurinos (por entender que la mayoría de los aficionados son mayores a treinta años, y ese segmento por su economía es el medio al que más acuden para su entretenimiento), ya que de hecho existe la experiencia del box que volvió a primeros planos en México a su retorno a ese medio.

En el tema de los toreros mexicanos que, por muchas razones desde hace 25 años, no son el factor principal en general de los carteles en México, sabemos que existe un gran número de ellos que en diferentes etapas de su carrera no representan de cara a la taquilla; el elemento principal que sí lo son, tres o cuatro toreros españoles.

El tercer tema va unido al segundo, porque parece que el público se está inclinando por una presentación de los astados que no deje espacio a la duda y, por supuesto, que en aras de exagerada nobleza, habrá quienes han dejado atrás la acometividad, codicia y fuerza que conllevan la sensación de peligro, elemento primordial para provocar torrente de emoción en los tendidos.

Entonces, ¡Eureka! Se me ocurrió que vale más un gran ejemplo que mil palabras, no hay de otra para retomar un poco de aire y salir hacia adelante en los temas tratados; el toro a todos pone en su lugar y al tiempo que es justiciero dejo la respuesta.

La inspiración me llegó de Mérida (Yucatán) con el éxito ganadero de San Miguel de Mimiahuapám de Don Alberto Baillères, el domingo 25 con su encierro ejemplarmente presentado, y el que la mayoría de los mismos, en comportamiento fueron emotivos, tanto que el representante del ganadero, Juan Pablo Baillères con Emiliano Gamero y Joselito Adame, al finalizar la lidia de su cada astado, paseó con ellos en son de triunfo. Al final se fue a hombros Adame y Sergio Flores, por sus fallas en el primero de su lote en la suerte suprema, se fue a pie.

Espero sus comentarios, para entender su punto de vista y aprovechar que todavía existen empresarios y ganaderos que invierten su dinero en aras de preservar una tradición tan nuestra y que son los puntales económicos de la fiesta. No sabría hasta cuándo, visto lo visto, se les agote la paciencia para seguir siéndolo.

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