El plan tiene como objetivo disuadir a las personas ingresar ilegalmente a EU y para que las mamás no lleven a sus hijos de manera indocumentada.
Washington, D.C.,- El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kelly, confirmó este martes que analiza un plan para separar a madres inmigrantes de sus hijos.
Como parte de una política para disuadir a las personas de ingresar de manera ilegal a los Estados Unidos, Kelly advirtió que el gobierno podría separar a las familias que crucen la frontera desde México.
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“Sí, lo estoy considerando, para impedir más movimientos en esta red terriblemente peligrosa, estoy considerando eso exactamente”, aseguró Kelly durante una entrevista con la cadena CNN.
“Haría casi cualquier cosa para disuadir a la gente de América Central a lanzarse en manos de esas redes tan peligrosas que los llevan a través de México hacia Estados Unidos”, indicó.
“Serán bien cuidados mientras lidiamos con sus padres. Tenemos mucha experiencia en lo que tiene que ver con los menores no acompañados”, colocándolos en hogares especializados o en familias receptoras, aseguró el secretario de Seguridad Nacional.
Kelly respondió a la CNN, después de que el viernes pasado tres funcionarios del Gobierno estadounidense dijeran a Reuters que las mujeres y niños que crucen juntos de forma ilegal por la frontera con México podrían ser separados.
Según rescata el diario Vanguardia, los funcionarios explicaron a Reuters que los niños serían puestos bajo una custodia especial del Departamento de Salud y Servicios Humanos, bajo el método menos restrictivo posible hasta que puedan ser cuidados por un familiar estadounidense o un tutor designado por el Estado.
Cabe destacar, sin embargo, que por el momento esta propuesta todavía está siendo considerada por el Departamento de Seguridad Nacional, y no será aplicada hasta nuevo aviso.
Los funcionarios indicaron que la medida buscará disuadir a las madres de ingresar a EU con sus hijos, ya que, usualmente, las familias que tratan de evitar la deportación o solicitan asilo son liberados con rapidez y se les permite quedarse en territorio norteamericano hasta que sus casos son resueltos.
Las cortes de apelaciones en Estados Unidos también impiden detenciones prolongadas en el caso de menores indocumentados.