Dejar cualquier adicción resulta sumamente difícil para las personas, sobretodo si se habla del vicio del cigarro. A pesar de que existen diferentes métodos para dejar de fumar, la ciencia reveló cuál es el método más eficaz para dejar esta adicción
Fumar es uno de los vicios más adictivos en todo el mundo, a pesar de que médicos han advertido sobre los riesgos de fumar, las personas continúan con este hábito. Uno de los grandes propósitos de las personas cada año es abandonar los vicios, sin embargo muy pocas lo logran. Es por ello que la ciencia reveló cuál es la mejor manera de dejar de fumar.
El vicio del cigarro es uno de los más comunes, además de que es considerado un vicio aceptable ya que esta permitido en casi todos los lugares. Al igual que cualquier otra adicción dejar de fumar resulta un gran reto para la mayoría de las personas.
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De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, una de las primeras causas de muerte a nivel global es el cáncer de pulmones, tráquea y bronquios, enfermedades que son provocadas en la mayoría de los casos por el tabaco.
Un estudio reciente realizado por la Universidad de Oxford reveló que los fumadores que van reduciendo gradualmente su dosis de nicotina para dejar de fumar, fracasan más en su objetivo que los que optan por abandonar este hábito de golpe. De acuerdo con los investigadores la probabilidad de éxito en el intento de dejar el vicio aumenta 25% si se corta de manera radical el vicio.
Para esta investigación se reclutó a 667 personas que deseaban dejar el tabaco, y se les dividió en dos grupos; el primero abandonó este hábito de tajo en una fecha fijada, mientras que el segundo grupo fue disminuyendo progresivamente el número de cigarrillos que consumían a lo largo de las dos semanas que duró el estudio.
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Ambos grupos gozaron de la asesoría de especialistas y se les proporcionaron parches y chicles de nicotina, entre otras formas de ayuda. Luego de que dejaron de fumar, los participantes fueron evaluados. Además de preguntarles cómo se sentían, los investigadores medían la cantidad de monóxido de carbono que exhalaban, una prueba objetiva de si seguían sin fumar.
Luego de un período de evaluación y asesoramiento de cuatro semanas, el 49% de los participantes dentro del grupo del corte abrupto dejaron definitivamente de fumar contra un 39% en el de corte gradual. Seis meses después, el 22% de los que dejaron de fumar de una vez lograron evitar la recaída y hubo un 15,5% de éxito en el otro grupo.
“El tener que ir reduciendo gradualmente el número de cigarrillos supone un esfuerzo extra pero, según el estudio, la gente prefiere la idea de dejar el tabaco gradualmente que hacerlo de forma radical“, señaló Nicola Lindson-Hawley, directora de la investigación.
La doctora señaló que las personas que deciden dejar el cigarro de manera parcial se enfrentan a dos retos: abandonar su costumbre del todo y cumplir los objetivos gradualmente de disminución. A pesar de esto la mayoría de las personas opta por dejar de fumar de manera gradual.
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De acuerdo con la especialista el éxito de dejar de fumar consiste en los deseos de la persona, así como el apoyo que se le muestre, ya que como cualquier otra adicción la persona pasará por distintas etapas que suelen ser nada agradables.
“Es importante tener en cuenta que estos resultados fueron alcanzados en personas que querían dejar de fumar rápidamente y que recibieron apoyo. La mejor estrategia parece ser elegir una fecha y, llegado ese día, dejar de fumar completamente“, aconsejó Lindson-Hawley.