El cenote descubierto debajo de la Pirámide de Kukulkán abre una carpeta más en lo interesante y apasionante que puede ser el conocimiento sobre la cultura maya.
Ciudad de México (elsemanario.com).- Científicos de la UNAM han descubierto un cuerpo de agua bajo la pirámide de Kukulkán en Chichen Itzá. Propiamente dicho, se trata de un cenote.
Con esto, se abren nuevas preguntas sobre el estudio de la cultura maya y el por qué pudo ser construida la pirámide sobre este cuerpo de agua.
En este sentido, René Chávez, quien es investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, explica que para este hallazgo se retomó el bagaje de conocimiento sobre el lugar, como las prácticas llevadas a cabo antes en la zona arqueológico.
Con ello, se utilizaron medios geofísicos para determinar qué irregularidades podía tener la pirámide en su interior; a su vez, se iniciaron las pruebas en otra cercana, El Osario, donde ya se tenía conocimiento de un hueco al interior de la misma, además de una escalinata que conducía al mismo hoyo.
Este cuerpo acuoso se detectó por una tomografía eléctrica, mediante electrodos diseñados particularmente para no dañar El Castillo, como también se le conoce a la pirámide ubicada en Chichén Itzá. Gracias a ello, se obtuvieron ciertos parámetros, que se mostraban como colores: el rojo indicaba cavidades, mientras que el azul, agua.
Se estima que el cenote tenga una medida de entre 30 y 35 metros en su parte más larga; mientras que su profundidad podría ser de 20 metros. René Chávez también dijo que
“Debajo de la pirámide detectamos un cuerpo acuoso que está rodeado de piedra caliza, y esto indica que es muy posible que esté asentada sobre un cenote”.
Es decir, el cenote no flota; está encima de una gruesa capa de piedra caliza.
Mientras que Andrés Tejero, de la Facultad de Ingeniería, indicó que la geofísica siempre tiene un margen de error, ligero, que suele dejar incertidumbre, pues los datos y cálculos se reducen. Por lo que señaló
“¿Tenemos la certeza de que exista? Sí, de las dimensiones son las que no podemos asegurar. ¿Que si El Castillo está abierto sobre el cenote? No. Tampoco sabemos a qué profundidad está”.
Según los investigadores, este cenote podría tener una conexión con el otro en donde se hizo la prueba; es decir, el de El Osario y Kukulkán podrían estar conectados por sus cuerpos de agua.
Lo interesante aquí surgirá cuando, de ser así, se descubra qué motivó las construcciones de estas pirámides sobre cenotes. Corresponde a los arqueólogos responder las preguntas que este descubrimiento devela, como si los mayas tenían conocimiento de ese cuerpo de agua antes de edificar la pirámide. Suceda lo que suceda, el resultado seguro nos sorprenderá.