Al cuarto para las doce, con la cuenta regresiva en los cuartos de campaña panistas y con la presión a todo vapor de los grupos reales de poder, sobre todo de telecomunicaciones, al parecer hay acuerdo ya entre los grupos parlamentarios del Congreso de la Unión y funcionarios del gobierno federal para aprobar esta semana en sesión extraordinaria las leyes secundarias en materia político-electoral, para darle tiempo así al Instituto Nacional Electoral (INE) de organizar las elecciones en 17 estados el próximo año.
Digo al parecer, porque el proceso interno de selección de candidatos a la dirigencia nacional del PAN (cuya elección es este próximo domingo 18 de mayo) y el revanchismo calderonista puede volver a romper acuerdos legislativos y retrasar la eventual aprobación de las citadas leyes reglamentarias.
De hecho, el apoyo abierto de Margarita Zavala, esposa del expresidente Felipe Calderón, al senador con licencia Ernesto Cordero y su guerra de lodo contra el grupo encabezado por Gustavo Madero amenaza con volver a aplazar acuerdos para encarecer los costos de la negociación en alianza con poderes fácticos que intentan mantener lo más posible sus privilegios, básicamente en intereses de telecomunicaciones y gasolineros.
En el INE los consejeros electorales han advertido ya el riesgo de seguir posponiendo la aprobación de la ley secundaria de la reforma político-electoral pues los tiempos se les vienen encima para elegir a consejeros de 17 entidades federativas que tendrán elecciones el próximo año. Sin embargo, esta ley fue la condición impuesta por el PAN para aprobar las otras legislaciones secundarias: telecomunicaciones y energética.
A pesar de todo, hay confianza de que antes de julio estarán aprobadas las leyes secundarias pendientes en los periodos extraordinarios que están por definirse. Se buscan las mayorías suficientes para su aprobación para que en el segundo semestre del año comience con las normas jurídicas necesarias totalmente completas.
Por encima de la disputa interna panista, se da por hecho un periodo extraordinario en el Congreso de la Unión esta semana para aprobar la ley secundaria de la reforma político-electoral. Al mismo tiempo, los presidentes de las comisiones de Hacienda y Energía de la Cámara de Diputados, Isabel Trejo y Marco Antonio Bernal, respectivamente, iniciarán el análisis de la parte que les corresponde de las leyes secundarias de la reforma energética.
Algunas estimaciones consideran que la reforma energética detonará inversiones privadas por más de 70 mil millones de dólares y generará 2 millones de nuevos empleos en los próximos años. Al mismo tiempo permitirá reducir precios del gas natural y la electricidad y la población en general podrá sentir una mejoría en sus condiciones de vida a mediano y largo plazo.