A un mes de lanzamiento, cines, restaurantes y tiendas departamentales sin señales de poder permitir pagos con CoDi.
Para Banco de México fue uno de los logros más innovadores en el sistema financiero. Con la llegada del Código Digital (CoDi) se estaba dando un gigantesco paso la modernidad, inclusión financiera y seguridad en el sistema de pagos en México.
Pero, a un mes del afamado lanzamiento, el CoDi está lejos de ser una realidad y su adopción en el mercado nacional se perfila para ser lenta y paulatina. Cines, tiendas de ropa, restaurantes, negocios de comida rápida y distintos establecimientos en centros comerciales, no cuentan con una plataforma que permita el pago con el código desde un teléfono celular.
El desconocimiento del uso del CoDi entre los empleados de los establecimientos comerciales es otro factor que entorpece la adopción.
Pero el problema no sólo radica del lado de los comercios, el consumidor también desconoce los beneficios de utilizar el CoDi y, en algunos casos, les resulta irrelevante o poco atractivo.
Para muchos usuarios, el uso del plástico es lo suficientemente eficiente para realizar sus compras.
De acuerdo con cifras de Banxico para el cierre del mes de octubre, el sistema financiero mexicano contaba ya con 500 mil cuentas listas para operar con CoDi, con proyecciones de crecimiento a millón y medio para el cierre de 2019, según estimaciones de Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).