“No esperes hasta que cumplas tu meta para estar orgulloso de ti mismo, enorgullécete de cada paso que tomes para llegar a esta meta”
Apoyar es la causa y no el efecto.
Sin importar cual de ellas… Cada causa es importante.
¿Qué se logrará? ¿Para qué? ¿Cuándo?
¿Por qué? ¿Dónde?
La vida es un gran abanico de posibilidades. Siempre que se quiera ayudar el universo nos presentará la manera para hacerlo.
Ayudar sin reserva y desinteresadamente trae como consecuencia recibir.
“Hacer lo que te gusta… es libertad
Que te guste lo que haces… es felicidad”
Recibir satisfacción, recibir felicidad, recibir las ganas de seguir ayudando.
A lo largo de la vida existen momentos diversos. En algunas ocasiones nos colocamos del lado de DAR y otras tantas en el de RECIBIR. Estas dos posturas que nos hacen comprender el ciclo natural de las relaciones, del proveedor y la vasija, de aprender a entregar y a soltar a sabiendas que al otro lado se encuentra el espejo.
El esfuerzo del DAR resulta gratificante, engrandece, suma y multiplica, mientras más doy más tengo, mientras más doy más recibo.
La postura de RECIBIR, de saber hacerlo en su más plena forma, con integridad, esa también engrandece y nos permite sentir humildad y gratitud.
Causas existen muchas y variadas.
Cada una de ellas es una gran oportunidad para conocer y conocernos, para entregar y estar así dispuestos a valorar lo que soy capaz de dar, a reconocer la alegría que se siente al participar.
Una vela que comparte su fuego no se extingue, por el contrario, enciende más luz.
Espíritu de lucha, participación en conjunto, ambiente de superación, compromiso con la vida y la salud, apoyo moral y económico, sensación de libertad a través de la entrega, unión y fraternidad, fuerza en la colectividad y la gran oportunidad de sentir empatía al correr con mis propios zapatos y lograr al mismo tiempo ponerme en los zapatos de los que más lo pueden necesitar….
Una medalla al llegar… Porque la meta, en realidad, siempre fue ayudar.

“La participación es una acción clave para un desarrollo humano sensible”